En un movimiento que sacude el panorama de las telecomunicaciones en España, el Consejo de Ministros ha dado luz verde este martes a la compra de Vodafone España por parte de la empresa británica Zegona. Esta operación, valuada en 5.000 millones de euros, marca un hito en el mercado y se espera que se formalice en las próximas fechas, una vez resueltas todas las incertidumbres regulatorias.
La adquisición de Vodafone España por parte de Zegona recibió previamente la aprobación tanto de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) como de la dirección general de Competencia en Bruselas, quienes no percibieron riesgos para la competencia en el mercado. Este respaldo regulatorio allanó el camino para que el Gobierno diera su visto bueno a la transacción.
El ministro de Transición Digital y para la Función Pública, José Luis Escrivá, anunció la autorización de la compra con una sola frase, evidenciando la importancia y la anticipada deliberación que tuvo este tema en el seno del Ejecutivo.
Las claves del acuerdo
El acuerdo entre Zegona y Vodafone España se alcanzó en octubre de 2023, y desde entonces se esperaba que el cierre de la compra se concretara en el primer semestre de este año. Zegona financiará la operación principalmente a través de un crédito de 4.200 millones de euros, suscrito por Deutsche Bank, ING y UniCredit, además de una línea de crédito ‘revolving’ de 500 millones.
Por su parte, Vodafone contribuirá con 900 millones de euros para la operación, mientras que Zegona buscará captar 600 millones adicionales de inversores externos. Como parte del acuerdo, Zegona podrá utilizar la marca Vodafone durante un máximo de diez años, así como otros servicios empresariales de la corporación, incluido el negocio del Internet de las Cosas.
Esta adquisición marca el retorno de Zegona al mercado español, luego de su incursión en 2015 con la compra de Telecable de Asturias, que posteriormente revendió a Euskaltel. Desde entonces, la firma de inversión estuvo ausente en el país hasta su ofensiva por Vodafone. Con esta nueva adquisición, se espera que el operador inicie una nueva etapa centrada en la agresividad comercial y en el fortalecimiento de su presencia en el mercado empresarial.
Los últimos números de Vodafone
Durante el pasado año fiscal, Vodafone España reportó ingresos por un total de 3.846 millones de euros, marcando un descenso del 1,6% en comparación con el mismo período del año anterior. De este monto, 3.429 millones de euros corresponden a ingresos por servicios, lo que representa una disminución interanual del 2,4%. Los ingresos restantes, que ascienden a 417 millones de euros, incluyen ventas de terminales y dispositivos, entre otras partidas.
Entre las razones detrás de esta disminución de ingresos destacan el impacto de la continua competencia de precios en el segmento de valor de consumo, así como una menor base de clientes y una reducción en las tarifas de terminación de llamadas móviles. Sin embargo, estos resultados trimestrales muestran una mejora en comparación con el último trimestre fiscal, durante el cual la facturación se redujo un 2,9%.
Un proceso a tener en cuenta
Por otra parte, Vodafone España ha anunciado la entrada en vigor de nuevas tarifas para Lowi, su marca de bajo precio, que fija en 20 euros al mes el precio de los servicios de fija óptica, datos móviles de 15 GB y llamadas ilimitadas. Esta iniciativa se suma a los esfuerzos del operador por ampliar la cobertura de 5G al 82% del territorio español, con una cobertura extendida en 2.700 municipios para finales de este año. El futuro en este 2024 se presenta prometedor para la compañía telefónica.
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