Podemos ha vuelto a aprovechar la tragedia de la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que azotó el sudeste de España la semana pasada para arremeter contra las grandes empresas que operan en la zona. Menos de 24 horas después de que el presidente Pedro Sánchez anunciara un paquete de ayudas de 10.600 millones de euros para los afectados. La formación morada apuntó a algunas compañías a las que acusó de mantener activas sus operaciones durante el fenómeno meteorológico, poniendo en peligro a sus trabajadores.
Podemos señala a Mercadona, Inditex, Ikea y Coca-Cola
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, no dudó en señalar explícitamente a grandes corporaciones como Mercadona, Inditex, Ikea y Coca-Cola, a las que calificó como «empresas criminales». En sus declaraciones, Belarra subrayó que el coste del «escudo social» que el gobierno pretende implementar debería financiarse a través de multas y sanciones contra estas empresas. A las que responsabilizó directamente por no cesar sus actividades en un momento crítico.
Podemos profundizó en su línea de crítica, lanzando una proposición no de ley para investigar y sancionar a aquellas empresas que, en su opinión, no tomaron las medidas adecuadas. En su momento, la propuesta no llegó a mencionar a las compañías por su nombre, pero ahora, Belarra fue mucho más explícita, acusando a estas multinacionales de una «conducta indignante» por no suspender sus operaciones y poner en riesgo a sus empleados. La líder de Podemos aseguró que este tipo de situaciones debe dar lugar a sanciones «ejemplares» que «hagan pagar a las empresas por lo que han hecho».
Durante su intervención, Belarra destacó la importancia de identificar a las empresas implicadas como una cuestión de «responsabilidad política». Enfatizando que el daño causado a las plantillas de trabajadores y a la sociedad valenciana en particular no podrá ser reparado. La exministra de Igualdad se mostró firme en que las empresas responsables deberían ser penalizadas por sus acciones.
Podemos apunta a los propietarios de los alojamientos turísticos en las zonas afectadas
Además, Podemos amplió su campo de críticas, apuntando también a los propietarios de alojamientos turísticos en las zonas afectadas. En su opinión, estos inmuebles deberían ser expropiados por las autoridades para ser destinados a alojar a las víctimas de la catástrofe. Incluidos los heridos y las personas que se han quedado sin hogar.
Por otro lado, las grandes empresas mencionadas no tardaron en reaccionar ante las acusaciones. Con un tono de enfado, las compañías afectadas negaron rotundamente las acusaciones de Podemos. Destacando que sus plantillas trabajaron de manera ejemplar durante la emergencia. En lugar de ignorar la situación, las empresas resaltaron el esfuerzo y la solidaridad de sus empleados, y refutaron las afirmaciones de la formación morada. Que consideran injustas y desproporcionadas.
Así, mientras el debate continúa sobre las responsabilidades en situaciones de emergencia y el papel de las grandes corporaciones, las tensiones entre las instituciones políticas y el sector empresarial parecen lejos de resolverse.
© Reproducción reservada