Scottish Power, la filial británica de Iberdrola, ha iniciado conversaciones preliminares con Ovo Energy con el objetivo de explorar una posible fusión que podría revolucionar el panorama energético británico. De materializarse la operación, ambas compañías darían lugar al tercer mayor suministrador de energía del Reino Unido, con una cartera conjunta que superaría los seis millones de clientes, situándose solo por detrás de British Gas (Centrica) y Octopus Energy.
Según ha adelantado Sky News, ejecutivos de Iberdrola y Ovo han mantenido en las últimas semanas contactos exploratorios sobre la viabilidad de una alianza corporativa que, en cualquier caso, aún se encuentra en una fase incipiente y no se espera que se cierre en el corto plazo. Las fuentes citadas por el medio británico indican que Ovo, que actualmente cuenta con unos cuatro millones de clientes, asumiría el rol de entidad compradora, aunque Iberdrola podría permanecer en el capital del nuevo grupo como accionista significativo. Por su parte, Scottish Power suministra energía a cerca de 2,4 millones de hogares.
Una posible fusión entre Iberdrola y Ovo Energy
La posible fusión se produce en un contexto en el que Ovo Energy ha puesto en marcha un proceso para captar hasta 300 millones de libras mediante una emisión de nuevas acciones. La operación, asesorada por Rothschild, tiene como fin reforzar la posición financiera de la compañía y atraer nuevos socios estratégicos. El movimiento responde a una estrategia más amplia que busca consolidar su crecimiento y diversificación tecnológica.
Fundada en 2009 por Stephen Fitzpatrick, Ovo se creó como una alternativa a los grandes grupos tradicionales del sector energético británico. Su despegue definitivo llegó en 2020, cuando adquirió el negocio minorista de SSE, situándose entre los líderes del mercado. En su accionariado figuran inversores como Mayfair Equity Partners, Morgan Stanley Investment Management y la japonesa Mitsubishi Corporation.
No obstante, la trayectoria de Ovo ha estado marcada por diversas controversias. La compañía ha mantenido una relación tensa con el regulador Ofgem y ha recibido críticas por errores de facturación a sus clientes. Bajo el liderazgo de Justin King, expresidente ejecutivo de Sainsbury’s, y con el reciente nombramiento de David Buttress, ex CEO de Just Eat, como nuevo primer ejecutivo, Ovo ha intensificado sus esfuerzos por mejorar su imagen y su cumplimiento normativo.
Ovo Energy y su plataforma Kaluza
Uno de los pilares del futuro de Ovo es su plataforma tecnológica Kaluza, diseñada para ofrecer soluciones inteligentes de gestión energética. Kaluza ha sido clave en la expansión tecnológica de la firma, y en 2024 la australiana AGL Energy adquirió un 20% de su capital, valorándola en 500 millones de dólares. Además, la compañía ha reforzado su apuesta por la movilidad eléctrica a través de su filial Charge Anywhere, que ya gestiona decenas de miles de puntos de carga públicos en Reino Unido.
La eventual alianza con Ovo permitiría a Iberdrola reposicionarse en un mercado altamente competitivo, marcado por una intensa transformación tecnológica y regulatoria. La adquisición de Scottish Power en 2007 por más de 11.000 millones de libras fue un hito en la internacionalización de Iberdrola, consolidando su presencia en Reino Unido y reforzando su apuesta por las energías limpias.
De momento, Iberdrola ha negado oficialmente estar estudiando esta operación, aunque las negociaciones siguen abiertas y podrían avanzar en los próximos meses si se cumplen las condiciones de mercado y se alcanza un acuerdo favorable para ambas partes.
© Reproducción reservada