El reciente apagón eléctrico del pasado lunes ha vuelto a situar en el centro del debate el papel de la energía nuclear en España. Ignacio Galán, presidente de Iberdrola, ha reiterado su postura a favor de prorrogar el cierre de las centrales nucleares, asegurando que representan “la solución menos cara para garantizar la estabilidad del sistema eléctrico”.
Durante la presentación de los resultados del primer trimestre de la compañía, Galán ha defendido que las centrales nucleares son «eficientes y seguras», aunque ha recordado que la política energética es responsabilidad exclusiva del Gobierno. Según el directivo, esta posición cuenta con el respaldo de un reciente informe de PwC, y se alinea con las decisiones tomadas por países como Francia, Reino Unido, Alemania, Estados Unidos, Corea, Japón o China, que han apostado por extender o reforzar el uso de esta fuente energética.
“Está claro que la política energética es responsabilidad de los gobiernos y tenemos que aplicar eso siempre”, insistió Galán, reiterando que las empresas solo pueden ajustarse a las directrices oficiales.
Posición de Ignacio Galán sobre el apagón
Sobre el apagón que afectó a gran parte del país, Galán ha evitado especular sobre sus causas, indicando que es Red Eléctrica como operador del sistema quien debe ofrecer las explicaciones pertinentes.
“Tengo mi opinión como ingeniero, pero no es el momento”, afirmó, aclarando que las plantas de generación de Iberdrola estuvieron siempre disponibles para operar bajo las instrucciones del operador.
El presidente de la energética también subrayó que las redes de distribución de Iberdrola permanecieron conectadas y que la compañía colaboró activamente en la restauración del servicio, respondiendo en cuanto Red Eléctrica dio la orden.
Galán quiso además reconocer la labor de los cerca de 2.000 profesionales de Iberdrola que contribuyeron a recuperar el suministro, destacando que lo hicieron «en un muy corto periodo de tiempo» y ante una situación «sin precedentes».
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