GettyImagesMoeve ha completado su salida del negocio de exploración y producción en Latinoamérica tras vender el 25% que poseía en el Bloque 53 en Surinam a la multinacional francesa TotalEnergies, según informó la compañía.
Con esta operación, la energética cierra el capítulo de sus activos de ‘upstream’ en Sudamérica, tras las desinversiones llevadas a cabo en Colombia y Perú durante 2023, y continúa avanzando en su proceso de desvinculación del petróleo.
El Bloque 53, ubicado en aguas profundas de la cuenca Guyana-Surinam, era el último activo en Latinoamérica del grupo en esta área. Moeve era socio del proyecto desde 2013 junto con Apache Corporation (45%) y Petronas (30%).
Moeve se desprendió de su participación del 20%
Esta venta se suma a otras desinversiones recientes relevantes. En 2023, Moeve también se desprendió de su participación del 20% en los yacimientos Satah Al Razboot, Umm Lulu, Bin Nasher y Al Bateel en Emiratos Árabes Unidos, también a TotalEnergies, en una operación valorada en 1.500 millones de euros. Gracias a estas operaciones, la compañía ha reducido su exposición al negocio de exploración y producción en un 70% respecto a 2022, lo que la posiciona como una de las petroleras más ágiles en su transición energética.
Además, Moeve vendió en agosto de 2023 su negocio minorista de butano, propano y autogás en España y Portugal a la chilena Copec por 275 millones de euros, reforzando así su estrategia de transformación.
Este proceso se enmarca en la hoja de ruta ‘Positive Motion’, con la que la empresa pretende que más del 50% de su Ebitda en 2030 provenga de actividades sostenibles, como el hidrógeno verde, los biocombustibles de segunda generación y los productos químicos renovables.
Actualmente, la única presencia activa de Moeve en exploración y producción se encuentra en Argelia, donde mantiene participaciones en varios campos clave.
El cambio estratégico se vio reforzado también a finales de octubre de 2023 con el abandono definitivo de la marca Cepsa, un paso simbólico en su camino hacia convertirse en un actor protagonista de la transición energética europea.
El plan inversor de Moeve hasta 2030 asciende a 8.000 millones de euros, de los cuales más del 60% se destinará a negocios sostenibles, como la producción de hidrógeno verde, biocombustibles 2G o infraestructura de recarga eléctrica ultrarrápida.
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