La reforma de subsidios por desempleo sorprende al Congreso con un coste diez veces menor de lo previsto

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La nueva versión del real decreto-ley que reforma los subsidios por desempleo ha entrado en el Congreso de los Diputados con un giro inesperado: pese a incluir nuevas medidas y renunciar al ahorro inicialmente previsto por la eliminación de la ‘sobrecotización’ para la jubilación de los mayores de 52 años, el Gobierno estima que el coste será de 64 millones de euros en su primer año, diez veces menos que los 648 millones previstos en la versión anterior.

Costes y ahorros redefinidos

Según la memoria de análisis de impacto económico, el gasto se producirá solo en el primer año, mientras que para el tercer año se prevé un ahorro de 43 millones de euros y de 44 millones de euros en el quinto año. La versión anterior del decreto, rechazada por el Congreso en enero, estimaba un gasto de 177 millones de euros en el tercer año y no preveía alcanzar el equilibrio presupuestario hasta el quinto año.

La reforma inicial contemplaba un recorte de 25 puntos porcentuales en la cotización para la futura jubilación de los beneficiarios del subsidio para parados mayores de 45 años, lo que se tradujo en una gran derrota parlamentaria tras el rechazo de Podemos, obligando a la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, a negociar una nueva versión con sindicatos, excluyendo este apartado.

Nuevas medidas y compatibilidades

La nueva versión del decreto incluye medidas adicionales, como la compatibilidad entre la prestación por desempleo y un empleo a través de un «complemento de ayuda para el empleo» (CAE), que beneficiará a unas 200.000 personas, sumándose a otras 230.000 que lo compatibilizarán con un subsidio. Esta idea, introducida en la primera versión restringida a los perceptores de ayudas asistenciales, ahora se amplía, estimándose un ahorro de 215 millones de euros en el primer año.

Ahorro en prestaciones y subsidios

El gasto del nuevo complemento de apoyo al empleo para la prestación contributiva supondrá 262 millones de euros. Sin embargo, endurecer el encadenamiento de la compatibilidad entre prestación y subsidio se traduce en un ahorro, reduciendo el gasto previsto inicialmente de 648 millones a 461 millones de euros, con un total del complemento ascendiendo a 723 millones.

La nueva contabilidad introduce una previsión de ahorro en prestaciones y subsidios, adelantando la vuelta al empleo y sustituyendo la prestación mientras se percibe el complemento. Esto supone un ahorro sustancial para el SEPE, estimado en 500 euros por persona que trabaje a tiempo completo y 150 euros para los que compatibilicen un trabajo con un subsidio, resultando en un ahorro de 938 millones de euros al año.

Estimaciones de ahorro futuro

El decreto prevé un ahorro adicional de entre 192 y 200 millones de euros al año en políticas activas gracias a la incorporación de desempleados a un empleo, junto con 300 millones de euros más al año en cotizaciones, generando un ingreso extra de 21,15 millones de euros anuales para prestaciones por desempleo.

El ahorro neto estimado para las arcas públicas generado por la compatibilidad asciende a unos 435 millones de euros al año, compensando el gasto en otros cambios en los subsidios. Con estos ajustes, el coste de la reforma se reduce a 64 millones de euros el primer año, comparado con los 648 millones previstos inicialmente, y se espera que se traduzca en ahorros estables en los años siguientes.

Reacciones en el Congreso

Las nuevas cifras han dejado perplejos a los técnicos de los grupos parlamentarios, quienes ven que la reforma pierde uno de sus pilares de ahorro, incluyendo nuevas medidas de compatibilidad entre subsidios y empleo. Algunos vinculan las nuevas estimaciones de ahorro con la necesidad de asegurar el cuarto pago de los fondos europeos, enfatizando los beneficios de la activación de parados, especialmente de larga duración, demandados por Bruselas.

Otros cuestionan por qué estas variables no se incluyeron en la versión inicial presentada hace más de seis meses, sugiriendo una falta de previsión en las estimaciones iniciales.

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