Alexandre Rangel, director y fundador del Grupo SIEspañaLas ‘Golden Visas’, esa ley que permitió que miles de inversionistas obtuvieran la residencia legal en España a través de la compra de bienes inmuebles, ya tiene los días contados.
En septiembre de 2013, durante el gobierno de Mariano Rajoy, se abrió la posibilidad de adquirir bienes inmuebles en España por un valor mínimo de 500.000 euros a cambio de la residencia legal. Esta medida fue originalmente impulsada para promover la economía española tras la crisis inmobiliaria y atraer inversionistas extranjeros que pudieran adquirir el gran inventario de viviendas originado por el colapso del mercado inmobiliario del 2008.
Sin embargo, ahora el gobierno sostiene que esta ventana legal ha sido una de las principales causantes del aumento exponencial de los precios de las propiedades en España. Alexandre Rangel, director y fundador del Grupo SIEspaña, opina que «ha sido una medida populista para satisfacer a los aliados del Gobierno».
Según el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana, para principios de este año, se habían concedido 14.576 Golden Visas desde que la ley entró en vigor en 2013. Estos datos resultan en un promedio de 121 visados por mes durante los últimos 10 años, cifras que, en realidad, son insignificantes para responsabilizar a este grupo de inversionistas extranjeros del aumento de los precios de la vivienda en España.
¿Hasta cuándo durarán las Golden Visas?
El 14 de noviembre del presente año, el Congreso aprobó la derogación de los artículos establecidos en la Ley 14/2013, de 27 de septiembre. Con este avance, se espera que la publicación en el Boletín Oficial del Estado se realice antes del 31 de diciembre de 2024. Por lo tanto, los inversionistas tendrán sólo tres meses después de la publicación, es decir, hasta el 31 de marzo de 2025, para solicitar la residencia legal a través de esta vía. La recomendación es que aquellos que deseen obtener la residencia por la compra de bienes inmuebles en España lo hagan lo antes posible.
¿Por qué esta medida afectará a los extranjeros si existen otras vías migratorias para residir en España?
Uno de los grandes beneficios de esta vía es que no obliga al extranjero a vivir de manera permanente en España para poder mantener la residencia. Los inversionistas y sus familiares pueden seguir viviendo en sus países sin tener que estar físicamente en España. Lamentablemente, hoy en día, muchos países de América Latina atraviesan graves crisis sociales, políticas y económicas. Tener una residencia en España les otorga la tranquilidad de contar con un «Plan B» en caso de que la situación les impida seguir viviendo en sus países.
Otro gran beneficio es que los hijos, incluso mayores de edad, de los inversionistas podían ser incluidos como parte del grupo familiar. De este modo, con la compra de una propiedad, todo el grupo familiar podía disfrutar de la residencia y de los beneficios de vivir en España. Muchos de los hijos de los inversionistas realizan sus estudios en prestigiosas universidades de España y luego deciden radicarse de manera permanente en el país. Esta era una excelente vía para atraer talento extranjero, ya que muchos de ellos establecen empresas en España, crean empleos y pagan impuestos, justo lo que necesita el país.
No es lo mismo llegar a España con un visado de estudiante que hacerlo con una residencia legal. Adicionalmente, a los dos años de residir en España, los hispanoamericanos pueden solicitar la nacionalidad española. A pesar de la existencia de otras vías migratorias, esta es una de las más solicitadas hoy en día por empresarios provenientes de América Latina.
¿Existe realmente una crisis inmobiliaria en España?
España atraviesa una crisis inmobiliaria desde hace varios años, sin señales claras de que la situación mejore, especialmente para el mercado local. Hoy en día, a los jóvenes les resulta muy difícil cubrir una renta mensual y, aún más, adquirir una propiedad. Cada vez son más las protestas que se ven en las calles de las principales ciudades, como Madrid y Barcelona, debido a la falta de acceso a la vivienda.
Sin embargo, no toda la culpa recae en los compradores extranjeros. Cuando comenzaron a llegar los inversionistas para adquirir las propiedades generadas por la crisis inmobiliaria, los precios empezaron a aumentar de manera exorbitante. Quienes establecían los precios de venta no eran los compradores extranjeros, sino los propietarios y sus agentes inmobiliarios, que se aprovecharon en gran medida de esta inversión extranjera para elevar los precios de sus propiedades. El inventario de viviendas resultante de la crisis se agotó, pero los propietarios continuaron con el mismo aumento desmedido al momento de vender.
Esto es lo mismo que estamos viendo ahora en Miami, con la llegada de tantos extranjeros latinos que huyen de las crisis en sus países. En mi opinión, la culpa no es del extranjero que invierte, sino de la falta de control y claridad en el mercado inmobiliario español.
¿Se ha visto un aumento sustancial de inversores después del anuncio del presidente del gobierno sobre la eliminación de las Golden Visas en abril de este año?
Sin duda, muchos de los que tenían pensado invertir en España han acelerado sus planes de compra de vivienda para solicitar la residencia. Al inicio del programa, en 2013, la mayoría de los inversores provenían de China y Rusia, quienes adquirían propiedades principalmente en la Costa del Sol. En los últimos años, y especialmente desde el anuncio en abril de este año, se ha observado un gran aumento de inversores provenientes de Venezuela, México y Colombia.
¿Qué opciones tendrán estos inversores después de marzo de 2025?
Una opción es la residencia no lucrativa. Actualmente, esta es una vía muy solicitada por aquellos extranjeros que desean vivir en España por períodos prolongados. Aunque este tipo de residencia no otorga permiso para trabajar, no requiere ningún tipo de inversión. Es la residencia que muchos estadounidenses y latinoamericanos están solicitando para retirarse en España.
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