El sector de la agricultura ecológica en España ha decidido mirar hacia Asia como principal destino de sus exportaciones tras el incremento de aranceles en Estados Unidos, hasta ahora su mercado estrella fuera de Europa.
Intereco, la asociación que agrupa a las autoridades públicas de control de producción ecológica, presentará a finales de este mes su primera “Guía de exportación ecológica”, enfocada en mercados como China, Japón, Corea del Sur, India, Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos.
Su presidenta, Regina Monsalve, ha recordado que EE.UU. representaba un volumen de ventas cercano a los 50 millones de euros anuales, con el aceite de oliva, el vino y la almendra ecológicos como productos estrella. Sin embargo, la incertidumbre arancelaria ha impulsado a las empresas españolas a reforzar su presencia en Extremo Oriente, donde la renovación del acuerdo de equivalencia de certificación ecológica para el vino entre la UE y Japón —vigente desde el 1 de octubre— beneficiará a más de 3.500 bodegas ecológicas españolas.
Monsalve ha defendido que la agricultura ecológica es la que “ve el campo como un ecosistema” y ha advertido sobre la dificultad que puede representar el acuerdo UE-Mercosur para el sector, debido a la proliferación de certificaciones parciales en Latinoamérica que “no son equiparables” al sello europeo de la Eurohoja.
Además, la dirigente ha hecho un llamamiento a actualizar la normativa de gestión forestal y apoyar la ganadería extensiva para prevenir incendios forestales, subrayando que “no hay mejor bombero que una parcela cultivada”. También ha recordado que la resiliencia de las explotaciones ecológicas se ha demostrado tras fenómenos climáticos extremos: tras la dana de 2024, solo el 8,9% de las tierras ecológicas en Valencia fueron abandonadas, frente al 30% de la agricultura convencional.
© Reproducción reservada