El Ministerio de Vivienda será el nuevo encargado de delimitar las zonas tensionadas en el mercado del alquiler, una competencia hasta ahora reservada a las Comunidades Autónomas (CCAA).
Esta modificación, recogida en la proposición de ley presentada por el PSOE, busca desbloquear la aplicación de las deducciones fiscales en el IRPF para los propietarios que alquilan inmuebles en áreas con dificultad de acceso a la vivienda.
La Ley de Vivienda de 2023 estableció deducciones fiscales de entre el 70% y el 90% para los arrendadores que alquilen en zonas tensionadas y cumplan ciertos requisitos.
No obstante, salvo por Cataluña y partes del País Vasco, la mayoría de las CCAA evitaron declarar zonas bajo esta condición, impidiendo que los caseros accedan a los beneficios fiscales estipulados.
Ante esta falta de acción, el Ejecutivo central decidió intervenir directamente.
Rubén Gimeno, secretario técnico del Registro de Economistas Asesores Fiscales del Consejo General de Economistas (REAF-CGE), aclaró que la propuesta del PSOE persigue que, una vez aprobada la ley, sea el Ministerio de Vivienda quien decida las zonas tensionadas ante la pasividad del resto de CCAA.
Gimeno puntualiza que esta medida afectará exclusivamente a efectos fiscales, ya que las competencias urbanísticas seguirán en manos de los gobiernos autonómicos.
Además, la propuesta incluye nuevas ventajas fiscales con el objetivo de estimular la oferta de alquiler a precios asequibles.
Los beneficios del alquiler
Se contempla una deducción del 100% en el IRPF para quienes alquilen por primera vez o reduzcan el precio más de un 5% respecto al valor de referencia determinado por el Ministerio.
Si el inmueble está en zona tensionada y se alquila a jóvenes entre 18 y 35 años, la deducción será del 95%; del 90% si solo está en zona tensionada; y del 85% si, sin estarlo, se arrienda a jóvenes.
En los demás casos, se aplicará una deducción del 60%, siempre que se cumplan los requisitos de rebaja o nueva entrada al mercado.
Con esta reforma, el Gobierno busca reactivar el mercado del alquiler y facilitar el acceso a la vivienda en los entornos más afectados.
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