GettyAlemania sigue en ‘shock’ después de la jugada del banco italiano UniCredit en la entidad germana Commerzbank.
Unicredit dio un paso importante en el tablero bancario europeo al revelar que posee una participación del 9% en Commerzbank. Andrea Orcel, CEO del banco italiano, dejó claro que no se trata de una meta final. Sino que, por el contrario, están abiertos a cualquier escenario, incluida la posibilidad de adquirir por completo al banco alemán.
El Financial Times desvela, este 16 de agosto, que la operación está generando un terremoto dentro del Gobierno de Alemania. En concreto, desvela que: «Berlín quedó sorprendida después de que JPMorgan pidiera a UniCredit que ofreciera una participación en Commerzbank». Además, pone énfasis en que «los altos funcionarios del gobierno desconocían las conversaciones con el prestamista italiano que dieron la impresión de que el enfoque era bienvenido».
El desconocimiento del Gobierno le está llevando a duras críticas por parte de la oposición.
Malestar político
El líder de la CDU, Friedrich Merz, ha criticado duramente al Gobierno alemán por la gestión en la participación del banco italiano UniCredit en Commerzbank, acusándolo de cometer graves errores. En un correo electrónico enviado el domingo, Merz afirmó: «Aparentemente, todo lo que podía salir mal, ha salido mal», y subrayó la necesidad de que el Gobierno federal responda con urgencia a varias cuestiones.
Merz destacó que para que el Gobierno alemán no registre pérdidas por su compra inicial de acciones en Commerzbank, el precio debería rondar los 26,00 euros por acción. Sin embargo, UniCredit compró un 4,5% de las acciones por 13,20 euros por título. Según Merz, el Gobierno se sorprendió al descubrir que UniCredit había adquirido simultáneamente otro 4,5% a través del mercado, lo que plantea interrogantes sobre la vigilancia del Ejecutivo en esta operación.
Además, mencionó que el presidente del Consejo de Administración de Commerzbank ha anunciado que no seguirá en el cargo después de 2025, lo que añade incertidumbre a la situación.
Merz exigió respuestas claras, como quién dentro del Gobierno alemán, hasta el Canciller Federal, estaba al tanto de los detalles de la operación. También planteó la posibilidad de que exista un acuerdo entre los gobiernos alemán e italiano, sugiriendo que la inversión de Lufthansa en ITA (antigua Alitalia) podría estar relacionada con esta transacción.
Concluyó afirmando que el Gobierno cometió un grave error en la venta de las acciones, no solo en términos técnicos, sino especialmente en los resultados obtenidos, y pidió que se aclare la postura frente a UniCredit y, potencialmente, al Gobierno italiano.
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