Air EuropaIberia ha confirmado que intentará comprar a la portuguesa TAP, tras el fracaso de su fusión con Air Europa. Esta orden se ha dado después de que los directivos de la aerolínea patria hayan descubierto que Bruselas ha actuado a sus espaldas para ponerle en bandeja a Air France la compra de la compañía mencionada, propiedad de Globalia.
TAP Air Portugal
A pesar de que el principal objetivo de Iberia era adquirir Air Europa, la aerolínea TAP podría ser «interesante para nosotros», reconoció hace unos días el Consejero Delegado de IAG, Luis Gallego. Este considera que la consolidación es el mejor camino para conseguir estabilizar el sector.
Luis Gallego, Director General de IAG
Por su parte, Francia ha logrado el apoyo de Alemania para convencer a la UE del peligro de la fusión entre las dos aerolíneas españolas, debido al negocio que concentran en el aeropuerto de Barajas, así como la necesidad de promover operaciones transfronterizas, como la que se produciría si Air France comprara Air Europa.
Air Europa, para Francia
¿Por qué Alemania y Francia se han aliado? En su momento, Air France, fue una de las empresas que compitió por quedarse con ITA Airways (antigua Alitalia), pero, en el último momento, el Gobierno italiano cambió de postura.
ITA Airways
Francia no estaba dispuesta a ceder en este conflicto y, por ello, exigió que fuera Air France y no la alemana Lufthansa, que también necesitaba expandir su negocio por Latinoamérica, quien se quedara con la aerolínea italiana.
Al final, Lufthansa se quedó con ITA a cambio de renunciar, por su situación de «digestión» de la compra de dicha compañía a la fusión con Air Europa. Esto le despejó el camino a la aerolínea francesa, permitiéndole pujar por la española.
Lufthansa
Campeones paneuropeos
La Comisión Europea defiende que la unión entre la principal aerolínea alemana y la italiana demuestra que el sector aéreo se está replegando tras la pandemia de Covid-19. Por tanto, solo es cuestión de tiempo que se creen «campeones paneuropeos», algo que convence mucho más a Bruselas que los «campeones nacionales».
Asimismo, para los funcionarios de la UE, el peligro de fusión entre Iberia y Air Europa reside en el negocio que ambas concentrarían en España, cosa que no sucede con la alternativa franco-holandesa a la que sirve en bandeja la compra de la segunda compañía española mencionada.
Bruselas respalda la compra de Air Europa por parte de Air France
El gran candidato de la UE para adquirir Air Europa es Air France- KLM. Este gigante europeo quiere hacerse con la mentada aerolínea de nuestro país con el objetivo de mejorar sus conexiones con Latinoamérica desde París y Ámsterdam. Para ello, cuenta con el respaldo y apoyo de la Comisión Europea.
Air France-KLM
Bruselas prefiere que Air France se haga con Air Europa en lugar de Iberia para evitar que ambas compañías controlen el sector aéreo español, lo cual supondría el dominio del aeropuerto de Madrid con respecto a los demás, así como la limitación en la competencia de los vuelos naciones e internacionales del mencionado aeródromo.
Un escenario sobre el que IAG había abierto todas las posibilidades para lograr el encaje del equipo de la Vicepresidenta Ejecutiva de la Comisión, Margrethe Vestager, responsable de la política de Competencia en Bruselas. Sin embargo, no lo ha conseguido.
Margrethe Vestager
Vestager aseguraba hace unas semanas que Air Europa e Iberia son «proveedores clave», prácticamente en exclusiva, «de conectividad entre España y el resto de Europa y Latinoamérica». Un escenario que, de acuerdo con ella, no se produciría con KLM o Lufthansa.
Conexiones entre Europa y Latinoamérica
Air Europa le aportaría a Air France y KLM unas conexiones muy buenas entre Europa y Latinoamérica. Por tanto, ese es el negocio que estas pretenden explotar desde sus aeropuertos en Ámsterdam y París. Esto supondría un duro golpe para IAG, pues, el holding que lidera el español Luis Gallego sería testigo de cómo su mayor competidor accedería a uno de los negocios en los que ahora este tiene ventaja.
Uno de los motivos por lo que Iberia quería comprar Air Europa era evitar que cualquier otro rival, especialmente Air France, lo comprara y, en consecuencia, disputara el dominio del hub de Madrid y de las rutas a Latinoamérica.
La propia cúpula de IAG ha afirmado que la unión de Air France-KLM con Air Europa sería una catástrofe para el sector, aunque lo cierto es que todo apunta a ello.
Dudas con respecto a la españolidad de IAG
Después de que Iberia anunciara su intención de comprar Air Europa, el Gobierno de Emmanuel Macron salió a la defensa de su aerolínea de bandera, Air France. Desde entonces, Francia ha intensificado sus contactos diplomáticos con la Comisión Europea, a través de su embajada en Bruselas, con la intención de resucitar las dudas sobre la «españolidad» de Iberia tras el Brexit.
Air France, reforzada gracias a su alianza con la holandesa KLM, ha desplegado toda una batería de contactos, a través de la embajada francesa en Bruselas, para impulsar el lobby que ya está desarrollando en la capital europea.
Por estas razones, la ofensiva de Air France tiene un fuerte componente político.
El mensaje que Air France ha lanzado a los altos cargos de Competencia de la UE se basa en la Normativa Comunitaria de Transporte Aéreo, la cual les impide efectuar vuelos internos dentro del espacio de la Unión a las compañías que no posean una mayoría de capital comunitario. Por ende, se le exige a IAG, como accionista de control, que el 51% de su propiedad sea europea.
Ofensiva sobre Barajas
Francia ha intensificado su ofensiva diplomática para intentar desmontar o, al menos, alterar la estabilidad del hub que Iberia tiene en el aeropuerto de Madrid con respecto a sus vuelos internacionales.
Dicho país considera que, contribuyendo a alimentar la incertidumbre sobre la españolidad de Iberia, haciendo que cale la idea de que se trata de una compañía extracomunitaria, las opciones de Air France para lanzar una ofensiva sobre Air Europa son mayores.
Globalia insiste en su viabilidad
Globalia, el holding a través del que la familia Hidalgo controla Air Europa, recibió 475 millones del fondo creado por la SEPI para ayudar a empresas estratégicas afectadas por la pandemia. De esta suma, la mencionada aerolínea ha devuelto 41,6 millones de euros en concepto de intereses.
El crédito SEPI de Air Europa consiste en un préstamo participativo de 240 millones y otro ordinario de 235 millones. Todos ellos se deben abonar antes del 2026.
Globalia, por su parte, insiste, tras no fusionarse con Iberia, en que su aerolínea tiene un proyecto que posee «solidez y viabilidad». Además, destaca que tiene por delante un «futuro sostenible». No obstante, explica que no es «ajena a la inestabilidad que presentan determinados mercados, ni tampoco a los retrasos en la entrega de nuevos aviones».
En 2023, Air Europa cerró el ejercicio con un beneficio de 165 millones de euros, una cifra que espera superar este año y con la que quiere afrontar los préstamos del Gobierno español.
Iberia bloqueó a Air France con Air Europa
Las actuales maniobras de Francia son una «venganza» contra Iberia por su fallida compra de Air Europa. En 2019, Iberia, a través de su matriz IAG, bloqueó una gran operación de la franco-holandesa Air France-KLM con quien iba a ser su socio en América Latina: Air Europa. Esta había firmado un acuerdo de joint venture con Air France-KLM para efectuar vuelos a Latinoamérica tras fracasar su pacto con Ryanair.
Latinoamérica
La actual alianza franco-holandesa tiene el propósito de mejorar las conexiones entre Europa y Latinoamérica a través de vuelos directos, ampliar la oferta de ambas aerolíneas y empezar a operar en nuevas rutas.
La compañía propiedad de Globalia trataba de plantarle cara a Iberia, que, ahora, ha intentado hacerse con el 100% de su capital, después de que esta anunciara un aumento de su oferta de vuelos a Brasil, Ecuador, Colombia, México, Perú y Uruguay. Dicho movimiento convirtió a Iberia en la primera aerolínea en alcanzar el récord de 300 vuelos semanas entre España y América Latina.
Con la mencionada operación de compra, IAG se quitaba de en medio a un competidor directo y eliminaba la posibilidad de que Air Europa pudiera pujar por ella.
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