El arte de perdurar 100 años: Telefónica, Hugo Boss, MG Motors, Metro-Goldwyn-Mayer y Umbro

telefónicaFoto: Umbro

La ‘cosecha’ empresarial de 1924 se levantó sobre las ruinas de la gran guerra para construir un imperio capaz de sobrevivir a la II Guerra Mundial y a la gran depresión. Flexibles al cambio y apostando por la innovación constante, se forjaron a fuego grandes nombres como Telefónica, Hugo Boss, MG Motors, Metro-Goldwyn-Mayer y Umbro.

El año 1924 demostró que las crisis sí crean oportunidades. Mientras Europa sanaba aún las heridas del final de la I Guerra Mundial y Rusia asumía el fallecimiento de Lenin, una nueva generación de empresas daba sus primeros pasos sin poder imaginar que, 100 años después y sobreponiéndose a la II Guerra Mundial y a la Gran Depresión, se convertirían un referente mundial dentro de sectores como el de las telecomunicaciones, moda, motor, deporte y cine.

Foto: MGM

Fue la misma época que vio nacer la ‘Semana Internacional de los Deportes de Invierno’ (después pasaría a llamarse Juegos Olímpicos de Invierno en 1926), que celebró la primera Carrera de San Silvestre en São Paulo, Brasil (replicada en el barrio de Vallecas en 1964) y que lloró la muerte del nostálgico escritor checo Franz Kafka.

Foto: Hugo Boss

Para España también fue un año de grandes cambios. Se constituyen los ayuntamientos de todo el país, se funda la Agrupación Deportiva El Rayo (actual Rayo Vallecano), inician las transmisiones de Radio Barcelona (actual Cadena SER) y se inaugura la primera línea de metro de la ciudad de Barcelona.

Foto: MG Motors

La bonanza económica que se vivió entre 1924 y 1929 impulsó el optimismo y consumo de los ciudadanos en Occidente, lo que permitió a las empresas construir unos cimientos sólidos. Los ‘felices años veinte’, al ritmo del charlestón, se convirtieron en la incubadora perfecta para el nacimiento de una nueva generación de compañías centenarias.

Telefónica: Una llamada al futuro

Compañía Telefónica Nacional de España (CTNE) se fundó el 19 de abril de 1924.

La firma, que contaba con la estadounidense ITT como fundadores y principales accionista, nació en el corazón de Madrid y su primera sede social estaba en la Avenida del Conde de Peñalver, la actual Gran Vía. Tuvo que esperar seis años antes de trasladarse al emblemático rascacielos del arquitecto Ignacio de Cárdenas, actual sede del Espacio Fundación Telefónica.

El éxito de la compañía no pasó desapercibido y, en 1945, el Estado español se hizo con el 79,6% de las acciones. Para 1960, la CTNE ya se transforma en la principal empresa de España con un total de 100.000 accionistas y 32.000
empleados.

Para José María Álvarez-Pallete, Telefónica es “una historia apasionante de constante transformación”. Esa que se reflejó en hitos como el inicio de las comunicaciones por satélite en 1967, el salto a la Bolsa de Nueva York en 1987, la irrupción en el mercado de Chile (CTC) y en Argentina (TASA) en 1990 y el lanzamiento en 1994 de la telefonía móvil digital: Movistar.

Foto: Telefónica

Telefónica empezó su proceso de privatización en 1995 y lo finalizó en 1999. Justamente un año después de que Fundesco y Fundación Arte Tecnología se fusionasen para crear la Fundación Telefónica.

La ausencia del Estado en Telefónica se acabará en 2024 cuando, en plena celebración por su centenario, el Gobierno comprará hasta un 10% de la compañía a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Una jugada que le convierte en el mayor accionista de la multinacional española y ayuda a contrarrestar la influencia de inversores extranjeros como el grupo saudí STC, que adquirió el 9,9% del capital en septiembre de 2023.

Continúa el reportaje de las empresas centenarias con los casos de Hugo Boss, MG Motors, Metro-Goldwyn-Mayer y Umbro en Business People de abril de 2024

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