El negocio de residencias de mayores crece un 6,6% en 2024

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El sector de las residencias para personas mayores continúa en plena expansión en España.

En 2024, la facturación conjunta de las empresas gestoras alcanzó los 5.650 millones de euros, lo que representa un incremento del 6,6% respecto al año anterior, según el más reciente informe del Observatorio Sectorial DBK de Informa.

Este resultado marca el tercer año consecutivo con un crecimiento cercano al 7%, una evolución sostenida que responde tanto al aumento de la demanda como al encarecimiento progresivo de las tarifas.

El estudio señala que, a cierre de 2024, existían más de 5.600 residencias operativas en todo el país, con una capacidad estimada de 402.000 plazas.

De ese total, aproximadamente 303.000 correspondían a centros privados, lo que representa el 75% del conjunto.

Dentro de esta categoría, el 58,5% eran plazas privadas puras y el 41,5% estaban concertadas con la Administración.

Control sobre residencias de mayores

El informe también pone de relieve un proceso de concentración progresiva del mercado.

Aunque el sector sigue siendo predominantemente fragmentado —con mayoría de operadores pequeños y locales— los cinco principales grupos ya controlan el 24% del valor total del sector, mientras que los diez mayores alcanzan el 35%.

Este fenómeno se debe, en gran parte, a adquisiciones estratégicas y a la apertura de nuevos centros por parte de grandes compañías, muchas de ellas con capital extranjero.

En cuanto a la estructura de ingresos, el 54% de la facturación procede de la gestión de plazas privadas puras, mientras que el 36% corresponde a plazas concertadas.

El 10% restante proviene de residencias públicas cuya gestión ha sido externalizada a entidades privadas.

La evolución positiva del sector se enmarca en un contexto de envejecimiento progresivo de la población española y un modelo de atención cada vez más profesionalizado.

Sin embargo, el informe advierte sobre los retos futuros relacionados con la sostenibilidad financiera del sistema y la necesidad de garantizar estándares de calidad homogéneos, especialmente en un escenario marcado por la creciente participación de operadores de gran escala.

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