Eroski ha cerrado su ejercicio fiscal 2024 con un beneficio neto de 81,7 millones de euros, lo que supone una caída del 24,35% respecto al año anterior, debido principalmente al incremento del impuesto sobre sociedades, que ascendió a 45,5 millones de euros.
A pesar de esta caída en el resultado neto, el grupo cooperativo vasco logró un beneficio antes de impuestos de 127,2 millones, un 23% más que en 2023, lo que refleja una mejora operativa en un contexto económico aún desafiante.
Las ventas brutas del grupo aumentaron un 2,7% interanual, alcanzando los 5.885 millones de euros, impulsadas por el buen comportamiento del sector alimentario, que creció un 3,3%. El beneficio operativo se mantuvo en 259 millones, mientras que el Ebitda subió ligeramente hasta los 331 millones, un 0,30% más que el año anterior.
En cuanto a su situación financiera, Eroski continúa reforzando su solidez mediante la amortización de deuda, reduciendo su pasivo en 59 millones de euros durante el ejercicio. Esta cifra supera en 15 millones lo inicialmente comprometido, dejando un total pendiente de 948 millones de euros, incluyendo las Obligaciones Subordinadas.
La cooperativa ha destacado que estos resultados se han conseguido a pesar del incremento de los costes salariales y operativos, lo que evidencia la fortaleza de su modelo de negocio y su capacidad para adaptarse a un entorno de consumo cambiante.
© Reproducción reservada