GettyImagenGlovo ha puesto en marcha un consejo asesor en el que se integran figuras relevantes de la política y del ámbito empresarial.
Entre sus miembros destacan el exministro de Asuntos Exteriores José Manuel García-Margallo, la exconsellera de Economía y Hacienda de la Generalitat Natàlia Mas y Raül Blanco, ex secretario general de Industria y expresidente de Renfe, cargo que dejó el pasado enero, según confirmaron fuentes de la compañía a Europa Press.
El nuevo órgano también suma a la exsenadora y ex secretaria general del PDeCAT, Marta Pascal, de acuerdo con lo publicado por El Confidencial.
A ellos se añaden perfiles alejados de la política, como Anna Miralles, directora de Sistemas y Tecnologías de la Información de Pro a Pro, y Manuel Arroyo, antiguo vicepresidente del FC Barcelona.
Los movimientos de Glovo
La decisión de reforzar su estructura con este consejo llega en un momento delicado para la empresa.
Hace apenas unas semanas, Delivery Hero, matriz alemana de Glovo, cuestionó la viabilidad de la filial española por el elevado impacto de las sanciones y la obligación de reclasificar a sus repartidores como asalariados en cumplimiento de la ‘Ley Rider’.
La presión económica es considerable: a 31 de julio, la Seguridad Social había reclamado a Glovo el pago de 450 millones de euros en multas y cotizaciones sociales vinculadas a esa regularización laboral.
En este contexto, el consejo asesor se perfila como una herramienta de influencia y orientación estratégica para afrontar un escenario regulatorio que amenaza con redefinir el futuro de la compañía en España.
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