El Fondo de Reserva de la Seguridad Social, conocido popularmente como la ‘hucha de las pensiones’, ha alcanzado los 7.022 millones de euros a fecha de 31 de mayo, según informó la Seguridad Social en su página web. Esta cifra marca un hito significativo, siendo la primera vez desde 2018 que el fondo supera los 7.000 millones de euros.
En los primeros cinco meses de 2024, el fondo recibió una aportación de 1.373 millones de euros, lo que impulsó su crecimiento. Este incremento se debe en gran parte al Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), que entró en vigor en 2023. El MEI, una de las piezas clave de la ‘reforma Escrivá’ de las pensiones, estipuló aumentos en las cotizaciones por contingencias comunes, en su mayoría asumidos por la parte empresarial.
Perspectivas optimistas para el resto de 2024
Las previsiones del Gobierno son optimistas para el cierre de 2024. Con la actual dinámica del empleo, se espera que el Fondo de Reserva alcance los 9.000 millones de euros a final de año. El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones destacó que el buen comportamiento de la afiliación ha permitido un crecimiento significativo en el número de afiliados a la Seguridad Social. En lo que va del año, más de 308.000 personas se han sumado a la afiliación, consolidando la cifra de 21 millones de afiliados en términos desestacionalizados. En términos medios, la afiliación ha aumentado en cerca de 567.000, superando los 21,37 millones.
Desde el 10 de junio, la afiliación diaria ha superado los 21,4 millones, con 727.553 afiliados más que a finales de diciembre de 2023. El año pasado, el Fondo de Reserva alcanzó los 5.578 millones de euros, con ingresos adicionales de 1.373 millones gracias al MEI.
Reformas en marcha y desafíos persistentes
El Gobierno está trabajando intensamente en la reforma del reglamento de Extranjería, en colaboración con las Comunidades Autónomas, Entidades Locales y otras organizaciones, con el compromiso de tenerlo listo en las próximas semanas para asegurar una reforma de calidad.
Sin embargo, el panorama positivo contrasta con el aumento del gasto del sistema, especialmente tras la revalorización de las pensiones en función de la inflación en un contexto de precios en alza. Este mes, el sistema afronta la paga extra de verano, estableciendo nuevos récords en la nómina mensual de las pensiones. El acelerado ritmo de gasto ha llevado a que la deuda de la Seguridad Social se duplique en cuatro años, pasando de 55.000 millones en 2020 a 116.000 millones en el último ejercicio, según el Banco de España. Desde la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa, la deuda ha aumentado un 223%.
El desafío del déficit de pensiones
El sistema de pensiones enfrenta un desafío considerable con un déficit que ha alcanzado los 2,49 billones de euros, según Fedea. La entidad advierte sobre la grave situación de las finanzas públicas debido al incremento del gasto en pensiones y cuestiona la efectividad de la última reforma para reducir el déficit contributivo. Fedea insta a los políticos a implementar medidas correctivas para evitar que el problema se agrave. En su análisis, critica la metodología de Moncloa para evaluar la salud financiera del sistema, que se basa en indicadores fiscales, es decir, en la relación entre ingresos y gastos anuales (déficit o superávit). Fedea sugiere el uso de un balance actuarial como una herramienta complementaria para valorar la solvencia del sistema de pensiones, una práctica que está ganando popularidad.
Un fondo vital para la estabilidad del sistema
El Fondo de Reserva de la Seguridad Social es esencial para garantizar el pago de las prestaciones contributivas, como las pensiones públicas, en caso de que los ingresos de la Seguridad Social sean insuficientes. Este fondo acumula capital durante períodos de bonanza económica para ser utilizado en épocas de déficit, actuando como un colchón financiero que busca asegurar la sostenibilidad del sistema de pensiones.
La situación actual del Fondo de Reserva y las reformas en marcha representan un esfuerzo por parte del Gobierno para fortalecer el sistema de pensiones en España. Sin embargo, el creciente gasto y la deuda del sistema indican que se necesitan medidas adicionales para asegurar su viabilidad a largo plazo.
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