La compañía española de ciberseguridad TRC obtuvo en 2024 un beneficio neto atribuido de 2,63 millones de euros, lo que representa un incremento del 35,1% respecto a los 1,94 millones del ejercicio anterior, según las cuentas depositadas en el Registro Mercantil.
La facturación de la empresa alcanzó los 86,67 millones de euros, un 21,1% más que los 71,57 millones de 2023. El resultado neto de explotación (ebit) se situó en 4,17 millones, un 18,16% superior al registrado el año previo, con un margen del 4,81%, ligeramente por debajo del 4,93% de 2023.
De cara a 2025, TRC prevé elevar su facturación hasta los 110 millones de euros, incrementar su cartera de pedidos a 150 millones (+43%) y alcanzar un ebitda de unos 7 millones de euros, según explicó el consejero delegado, Alfredo Estirado, en declaraciones a Europa Press el pasado abril.
Estas cifras forman parte del plan estratégico 2025-2030, cuyo objetivo es que la empresa alcance en 2030 una facturación de 450 millones de euros, un ebitda de 28 millones y una plantilla de alrededor de 1.000 trabajadores, frente a los 350 actuales.
Con estos resultados, TRC consolida su posición como uno de los referentes españoles en ciberseguridad, apostando por el crecimiento sostenido y la expansión de su plantilla para los próximos cinco años.
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