GettyImagenEl grupo textil catalán Mango transformó su sociedad principal, Punto Fa S.L., en una sociedad anónima bajo la nueva denominación Mango MNG S.A.
La decisión se aprobó por unanimidad en la junta de accionistas del pasado 6 de junio, y formalizada en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME).
Este movimiento incluye además el traslado de su sede al Campus Mango de Palau-solità i Plegamans (Barcelona), a partir de este verano.
La conversión a sociedad anónima —figura jurídica habitual en grandes compañías— se justifica por el volumen actual de Mango, que cerró 2024 con una facturación récord de 3.339 millones de euros y un beneficio neto de 219 millones.
Según la empresa, la medida responde a ese crecimiento, y no a un interés por salir a Bolsa, como reiteró su consejero delegado y presidente, Toni Ruiz: “No está sobre la mesa”.
No obstante, con este cambio, Mango se dota de una estructura plenamente compatible con un eventual salto.
En 2024, la ya extinta Punto Fa S.L. distribuyó dividendos por casi 170 millones de euros, el mayor reparto de su historia y el primero desde 2012.
La transición en Mango
Tras el fallecimiento de su fundador Isak Andic en diciembre de 2023, la compañía reforzó su gobierno corporativo.
Toni Ruiz fue nombrado presidente a través de su sociedad Ionian Investments (con un 5% del capital), mientras que Jonathan Andic asumió la vicepresidencia y la presidencia de Mango MNG Holding, titular del 95% restante.
Mango también amplió su consejo de administración con perfiles independientes vinculados a procesos de internacionalización y salidas a Bolsa, como Marc Puig (Puig), Jorge Lucaya (AZ Capital), Jordi Constans (Fluidra) y Manel Adell (ex-Desigual).
Actualmente, los consejeros independientes representan el 55% del consejo.
Aunque sin planes de cotizar, Mango avanza en una profesionalización que la sitúa cada vez más cerca del ecosistema de las grandes empresas cotizadas.
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