De California a Texas, ese es el recorrido que realizarán las sedes de la compañía de cohetes, SpaceX, así como la red social X Corp. (anteriormente Twitter), según ha comunicado oficialmente este martes, 16 de julio, su presidente ejecutivo, Musk. El multimillonario de origen sudafricano ha anunciado esto en su cuenta de X y ha justificado su decisión en el nuevo proyecto de ley sobre menores trans del estado ahora se hallan radicadas las dos empresas mencionadas.
«Esta es la gota que colma el vaso. Debido a esta ley y a muchas otras que la precedieron, que atacan tanto a familias como a empresas, SpaceX ahora se trasladará su sede de Hawthorne, California, a Starbase, Texas», ha escrito Musk en su perfil de X. Asimismo, ha indicado que el cuartel general de dicha red social también pasará a Texas, cambiando de San Francisco a Austin.
En su publicación de X, el magnate aludía al proyecto de ley AB1955 que firmó el pasado lunes, 8 de julio, el gobernador de California, Gavin Newsom, el cual prohíbe obligar a los docentes a notificar a las familias los cambios de identidad de género de los estudiantes. Esta norma pone fin a una ardua batalla de un año entre las juntas escolares conservadoras, centradas en los derechos de los progenitores de jóvenes trans, y los activistas LGBTQ+, que velan por estos últimos.
La nueva ley protege a los maestros de las posibles represalias que podrían sufrir al apoyar los derechos de los estudiantes transgénero y prohíbe las reglas de «divulgación forzada» en determinados niveles. Dicha norma se ha impuesto como respuesta a la decisión que han tomado las juntas escolares en algunas zonas republicanas de California de notificar a los padres si su hijo cambia de nombre o pronombres, o bien, si alguno de los estudiantes solicita usar instalaciones o participar en programas que no coinciden con el sexo que tienen en los registros oficiales.
«Hace un año, dejé claro al gobernador Newsom que leyes de esta naturaleza obligarían a las familias y a las empresas a abandonar California para proteger a sus hijos», ha publicado Musk en su perfil de X.
Actualmente, SpaceX cuenta con una enorme sede en las afueras de Los Ángeles, donde los empleados construyen y ponen a prueba diversos componentes de los motores de cohetes, naves espaciales y satélites. En 2021, Musk trasladó la sede de Tesla (otra de sus empresas) a Texas, aunque California sigue siendo su centro de ingeniería.
Este traslado empresarial de Texas a California por parte del multimillonario no constituye un hecho aislado, ya que muchas compañías tecnológicas protagonizan, desde hace tiempo, un éxodo entre ambos estados, siempre en el mismo sentido. Dichos movimientos, que también afectan al área fronteriza entre México y EE. UU., ha favorecido la implantación de un hub que saca partido del bilingüismo y biculturalidad de esa zona.
Firmas históricas como Oracle y Hewlett-Packard Enterprise (HP) ya emprendieron esta misma ruta, hartos de lo que consideran un entorno demasiado regulado por el Gobierno. Asimismo, optan por Texas, ya que dicho estado no cobra impuesto sobre la renta (excluyendo el federal, que deben pagar todos los ciudadanos estadounidenses) y cuenta con uno de los impuestos de sociedades más bajos del país, así como una legislación muy laxa en ese sentido.
© Reproducción reservada