Revolut no se conforma con ser el rey de las finanzas personales en el móvil. Con picos de penetración del 20% en Barcelona y Madrid, el neobanco británico ya está afinando su siguiente jugada: meterse de lleno en la banca para empresas. Y lo va a hacer a lo grande.
Según han contado a elEconomista.es desde su hub en Barcelona, el plan está claro: en los próximos 12 a 18 meses, Revolut quiere plantar cara en el sector B2B con nuevos productos pensados específicamente para el mercado español. Después de Francia, España es el siguiente gran objetivo para su división Business, y la ofensiva ya está en marcha.
Antoine De Nel, jefe global de crecimiento, y Alex Codina, director del Tech Hub de la firma en Barcelona, lo tienen claro: el crédito para empresas será la punta de lanza. En su hoja de ruta aparecen desde préstamos clásicos y líneas de crédito hasta soluciones más avanzadas como factoring.
“Es un sector más complejo, pero tenemos un plan muy sólido para los próximos dos o tres años”, apunta De Nel.
Actualmente, Revolut ya ofrece a empresas terminales de pago (TPV), incluso con el móvil como datáfono, pero el salto a los productos financieros puros es su gran apuesta. Y llega justo cuando el sector anda revuelto por la opa de BBVA a Sabadell, que podría reducir la competencia.
“No buscamos captar clientes cabreados, pero es verdad que podríamos salir beneficiados”, reconocen desde la compañía.
Codina también lo deja caer:
“Creemos en dar alternativas. Si otros se centran en fusiones y procesos internos, nosotros seguiremos a lo nuestro: innovar y crecer”.
Cajeros, tarjetas e ¿hipotecas? Si, en Revolut
Pero la cosa no se queda solo en el mundo corporativo. Revolut también está desplegando novedades para el usuario de a pie. La más reciente: sus propios cajeros automáticos. El primero se estrenó en Barcelona durante el Primavera Sound, y la idea es llegar a 200 en toda España en los próximos dos años, empezando por Barcelona y Madrid con unos 50 terminales.
Estos cajeros, además de sacar pasta, permitirán a los usuarios recoger sus tarjetas físicas. Todo el sistema ha sido desarrollado en el Tech Hub de Barcelona, y España es el primer país donde se prueba. Si todo va bien, lo extenderán al resto del ecosistema Revolut.
Y si miramos un poco más allá, entre 2026 y 2027, la gran novedad serán las hipotecas. Ya las están ofreciendo en Lituania, y su objetivo es replicar el modelo aquí.
“Queremos madurar como banco y ofrecer productos más potentes, como hipotecas, sobregiros y tarjetas de crédito”, explica De Nel.
¿Significa eso que veremos oficinas físicas de Revolut por nuestras calles? Spoiler: no. Su apuesta sigue siendo 100% digital.
© Reproducción reservada“No vamos a negociar. Te damos la mejor oferta posible desde el principio y tú decides si la tomas o la dejas”, zanja De Nel.