Santander y el ICO impulsan 120 viviendas de alquiler asequible en Vitoria con fondos europeos

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Banco Santander y el Instituto de Crédito Oficial (ICO) realizaron la primera operación conjunta enmarcada en la Línea ICO del Plan de Recuperación destinada a la promoción de vivienda en alquiler social o a precio asequible.

La iniciativa se materializa con la financiación de un proyecto de 120 viviendas protegidas (VPO) en el barrio de Zabalgana, en Vitoria, a través de un préstamo promotor concedido a la empresa Torgiko, perteneciente al Grupo Sarkis-Lagunketa.

Esta operación representa un paso clave en la segunda fase del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que canaliza fondos europeos Next Generation EU.

Concretamente, la Línea ICO está enfocada en proyectos de nueva construcción o rehabilitación de edificios para su uso como vivienda de alquiler asequible, con criterios de eficiencia energética.

Para facilitar el acceso a la financiación, el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana respalda estas operaciones con un aval público del 50%.

El apoyo de Santander

Banco Santander refuerza con esta operación su liderazgo en el mercado de financiación con respaldo del ICO.

En 2024, la entidad se posicionó como líder en la concesión de Préstamos ICO, alcanzando una cuota del 39%.

La mayoría de estos fondos se dirigieron a las Líneas ICO Empresas y Emprendedores, aunque también se destinaron recursos a los programas de internacionalización y rehabilitación de vivienda.

Además, el banco viene participando activamente en la distribución de las Líneas ICO MRR del Plan de Recuperación, en sus distintas variantes: MRR Verde, MRR Empresas y Emprendedores y MRR Promoción de Vivienda Social.

Estas líneas cuentan con un presupuesto global de 34.000 millones de euros y están dirigidas a apoyar inversiones empresariales viables y sostenibles.

La financiación a Torgiko en Zabalgana marca un precedente relevante para futuras colaboraciones entre el sector bancario y el ICO, en un contexto en el que la inversión pública-privada es clave para atender la creciente demanda de vivienda asequible y avanzar hacia un parque inmobiliario más sostenible y accesible.

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