En el transcurso del año 2023, España se enfrentó a un desafío económico significativo debido al alto nivel de absentismo laboral, que se tradujo en un coste total de 37.000 millones de euros, según reveló Josep Sánchez Llibre, presidente de Foment del Treball, durante la presentación de un informe conjunto con Adecco. Esta cifra alarmante equivale al 3,1% del Producto Interior Bruto (PIB) del país y refleja una tasa media del 7,2% de las horas laborales totales, lo que significa que diariamente aproximadamente 1,5 millones de trabajadores no asistieron a sus puestos de trabajo.
El impacto del absentismo no se limita a una mera estadística económica; afecta profundamente a sectores clave donde las tasas de ausencia pueden alcanzar entre el 20% y el 30%, comprometiendo gravemente la competitividad y estabilidad de las empresas. Según destacó Sánchez Llibre, el 80% del absentismo se debe a incapacidades temporales por contingencias comunes, lo que subraya la necesidad urgente de implementar soluciones efectivas mediante la colaboración con mutuas y administraciones públicas.
Influencia de la pandemia y nuevas dinámicas laborales
El informe también aborda cómo la pandemia de COVID-19 exacerbó este problema, incrementando las tasas de absentismo en los últimos años. En 2023, las ausencias debido a incapacidad temporal representaron el 5,6% de las horas programadas, mientras que el total de absentismo laboral alcanzó el 7,2%. Aunque el estudio no encontró diferencias significativas en las tasas de ausencia según género, puesto de trabajo, edad, tipo de contrato o salario, sí identificó que jornadas completas y turnos de trabajo incrementan estos niveles, sugiriendo la necesidad de ajustes en la organización laboral.
Importancia de la negociación colectiva y propuestas de solución
En este contexto, la negociación colectiva emerge como una herramienta crucial para gestionar el absentismo. Enric Vinaixa, secretario de Treball, enfatizó la relevancia de abordar problemas de salud mental y promover colaboraciones público-privadas para encontrar soluciones proactivas. Las propuestas de Foment del Treball no solo apuntan a reducir el absentismo, sino también a mejorar la competitividad y productividad empresarial, especialmente en un momento donde se debaten temas como la reducción de la jornada laboral.
Un reto para el futuro
En conclusión, el absentismo laboral representa un desafío persistente y costoso para las empresas españolas. Las soluciones propuestas incluyen un mayor control de las bajas médicas, una participación activa de las mutuas y mejoras en el sistema de salud pública. La colaboración entre empresas, mutuas y administraciones será crucial para afrontar este reto y promover un entorno laboral más eficiente y saludable. Con estas medidas, se espera no solo mitigar el impacto económico del absentismo, sino también fortalecer el tejido empresarial español en un contexto global cada vez más competitivo.
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