Joaquín Pérez Rey, sobre la jornada de cuatro días: “Actualizaremos las sanciones a las empresas”

jornada laboral

El secretario de Estado de Trabajo defiende los beneficios de la reforma de la jornada laboral, pero admite que será necesario aumentar los controles para garantizar su éxito. El primer paso será “hacer es un control horario mucho más eficaz y basado en las nuevas tecnologías” y, a partir de ese momento, “determinar también sanciones que sean lo suficientemente disuasorias”.

Para Joaquín Pérez Rey es fundamental implementar nuevos castigos para las compañías que se salten la reducción de la jornada laboral: “Hay que actualizar las sanciones y establecer parámetros distintos como ejemplo, sancionar por persona trabajadora”.

¿Qué beneficios generará en los trabajadores la reducción de la jornada laboral en España?

Es evidente que en los trabajadores tendrá un impacto directo, elevando su bienestar. No solo permitirá una mayor disponibilidad de tiempo libre para poder dedicarlos a proyectos personales, ajenos al trabajo. Mejorará la conciliación de la vida laboral y familiar, permitiendo dedicar una parte de la jornada liberada a los cuidados o proyectos familiares, sino que también liberará tiempo de trabajo especialmente, para la formación, para recualificación, es decir, en definitiva se tratará de una elevación del bienestar general de los trabajadores que espoleará además, la productividad de las empresas porque esta es una medida bilateral con efectos beneficiosos para las empresas.

Algunos expertos estiman que hará caer el PIB y aumentará el Paro. ¿Están de acuerdo?

Al contrario. Los datos que disponemos demuestran que los países que han acometido reducciones de jornada han tenido un incremento de su productividad y han ganado en competitividad. Yo creo que la reducción que propone España, que es una reducción que, por cierto, muchos sectores productivos ya han acometido y que está reflejada en muchos convenios colectivos, no es, por tanto, una novedad. Va a permitir recuperar nuestra productividad, mejorar el bienestar y, por cierto, alimentar seguramente el crecimiento económico porque todo ese tiempo de trabajo liberado tendrá efectos beneficiosos directos sobre el consumo y el crecimiento económico.

El vicepresidente del BCE indicó que reducir la jornada «no sería bueno desde el punto de vista económico»

No coincide con nuestro análisis. Nosotros creemos, además, que la reducción de jornada es uno de los elementos, por cierto, del debate civilizatorio que es un debate que debe tenerse en el conjunto de Europa. Europa tiene que trabajar menos y ser más productiva y yo creo que esta es la clave de la ciudadanía europea: el trabajo con derechos y la reducción de la jornada junto con el incremento de la productividad.

jornada laboral

También existe preocupación sobre cómo afectará a las empresas españolas

Yo creo que esta cuestión ayudará a mejorar la productividad de las empresas. No es lógico que tengamos la misma jornada establecida desde los últimos cuarenta años, congelada, sin cambio normativo. Por lo tanto estamos en una especie de foto fija en materia jornada que no se corresponde ni con la evolución de los salarios ni con la evolución de la productividad. Es el momento de dar pasos en este elemento de reducción de la jornada en un país que necesita incrementar su productividad y que necesita superar la brecha salarial con Europa. Por cierto, la jornada también puede explicarse en términos de empleo, en términos de crear más puestos de trabajo y consideramos que es un debate inaplazable.

Desde el Gobierno destacan la importancia de reforzar el control de horas ¿Cómo se podrá aumentar la supervisión de horas trabajadas?

Necesitamos un control horario mucho más eficaz, basado en las nuevas tecnologías y que tenga una mayor comunicación con la Inspección de trabajo y la Seguridad Social para que puedan monitorizar el cumplimiento por parte de las empresas de los registros horarios. Las principales damnificadas de los incumplimientos normativos son las propias empresas que tienen que hacer frente a conductas de competencia desleal por aquellos que no respetan los derechos laborales. Por lo tanto, estoy convencido que son las empresas que llevan a cabo una gestión absolutamente ejemplar de sus derechos laborales las primeras interesadas en que el control del registro horario sea lo suficientemente eficaz.

¿Prevén la creación de nuevas sanciones? ¿Cuáles serían?

Prevemos dos cosas en este sentido. En primer lugar, en la mesa de diálogo social que aborda la reducción de jornada, Trabajo ha dejado claro que quiere también reformar el sistema de control horario. Para nosotros, lo decimos siempre, el reconocimiento de derechos laborales no puede ser un espejismo. Los derechos laborales están para poder ser aplicados. El registro horario en nuestro país en este momento, no es lo suficientemente eficaz y hace que la Inspección de Trabajo y Seguridad Social no pueda desarrollar sus funciones como debiera. Por lo tanto, lo primero que queremos hacer es un control horario mucho más eficaz y basado en las nuevas tecnologías. Y a partir de ahí, determinar también sanciones que sean lo suficientemente disuasorias. Es evidente que en algunas ocasiones la sanciones previstas para el incumplimiento del tiempo de trabajo actualmente en la LISOS [Real Decreto Legislativo 5/2000, de 4 de agosto, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social] que suelen además, determinarse por la empresa y no por el trabajador no tienen esta finalidad disuasoria. Hay, entonces, que actualizar las sanciones y establecer parámetros distintos como ejemplo, sancionar por persona trabajadora.

¿Cómo valoran la reacción de las empresas a la implementación de la reducción de la jornada laboral?

Este camino conforma uno de los horizontes más importantes de la legislatura del nuevo gobierno y está en el acuerdo de coalición entre las dos fuerzas políticas que sustentan al gobierno, el Partido Socialista y Sumar. Hemos dado ya un primer paso de gigante y es que la patronal española ha admitido, que es necesario debatir el tiempo de trabajo y abordar específicamente el debate de la jornada. Por lo tanto, yo creo que este es el primer paso de la madurez del diálogo social en España. Este debate tiene una incidencia distinta en los diferentes sectores. Ya hay sectores productivos como el sector financiero, la administración pública o algunos otros vinculados al sector servicios donde este debate ya se ha producido y que, por lo tanto, tenemos convenios que están en esos límites de las treinta y siete horas y media. Nuestro reto es ampliar esos derechos al conjunto de los trabajadores y de las empresas y también garantizar que sean productivas. Y, más allá, que los trabajadores de otros sectores productivos empiecen a descubrir y a acceder a estos efectos beneficios que en términos generales, nadie duda que la jornada más reducida tiene.

¿Los contratos a tiempo parcial verán aumentado su salario?

El planteamiento que hace el Ministerio y que se refleja expresamente en el acuerdo de gobierno es que estas reducciones de jornada se produzcan sin disminución, sin rebaja salarial alguna.

¿Qué otras medidas se pueden aplicar para mejorar la calidad de vida?

La reducción de la jornada de trabajo ya producirá un efecto en el bienestar de los trabajadores en general. Pero está claro que no es el único elemento. En las últimas décadas nos hemos acostumbrado a que la jornada sea un instrumento en manos de las empresas para colocar el trabajo en aquellos momentos en los que es más rentable. Hay que ir empezando a no deshacer ese camino sino hacer ese camino más justo y equilibrado. Y la jornada no solo en su quantum, no solo en su duración total, sino que también tiene que ser abordada en su distribución. Porque para los trabajadores y trabajadoras, al igual que es importante no trabajar tanto, es importante trabajar en los momentos más adecuados para que puedan garantizarse los cuidados, la conciliación familiar.

Por lo tanto, el debate será no solo cuánta jornada, sino cómo se usa esa jornada. Y en esos usos de la jornada, en esos usos del tiempo, tenemos que empezar a introducir reglas en el Estatuto de los Trabajadores que permitan una gestión bilateral de la jornada. Por lo tanto, no es solo un debate de cuántas jornadas sino que es un debate de cómo se usa esa jornada. Y es que uno de los grandes retos que tendremos que abordar a través de lo que nosotros venimos llamando unos usos del tiempo razonables.

© Reproducción reservada