El gigante tecnológico Microsoft está a punto de ejecutar una nueva ronda de despidos en su división de Xbox, lo que marcaría el cuarto ajuste de plantilla en apenas 18 meses. La medida forma parte de una estrategia de reorganización interna que busca optimizar la rentabilidad del área de videojuegos.
Según información adelantada por Bloomberg, diversos cargos intermedios dentro de Xbox anticipan un recorte significativo de personal. Durante 2024, la compañía ya llevó a cabo tres rondas de despidos y cerró varias filiales relacionadas con su negocio de entretenimiento interactivo.
Esta reestructuración responde, en parte, a las exigencias de los altos mandos de Microsoft para mejorar los márgenes de beneficio de Xbox, especialmente tras la adquisición en 2023 de Activision Blizzard por 69.000 millones de dólares (unos 59.367 millones de euros).
Además, se espera que los próximos recortes afecten sobre todo al área de ventas, lo que coincide con el cierre del año fiscal de Microsoft, que finaliza el 30 de junio.
Este nuevo ajuste confirma las dificultades que enfrenta Xbox para integrar sus nuevas adquisiciones y cumplir con los objetivos financieros de la multinacional, en un contexto cada vez más competitivo en la industria del videojuego.
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