La producción mundial de vino está dominada por Francia, Italia y España, que concentran la mitad de la producción global. Esto se debe a que el cultivo de la vid prospera en climas templados y cálidos, característicos de la región del Mar Mediterráneo. Aunque se cree que el vino se originó en los montes Zagros, una región de Oriente Medio que actualmente ocupan Irak e Irán, fue en la antigua Grecia donde su consumo se popularizó gracias a las avanzadas técnicas de fermentación y conservación de la época. En aquellos tiempos, el vino se mezclaba con agua y se almacenaba en pellejos de cabra.
A lo largo de los años, la enología, la ciencia que estudia la elaboración del vino, ha evolucionado para considerar diversos factores que influyen en el producto final: desde la elección de la uva (existen alrededor de 10.000 variantes, según la experta británica Jancis Robinson), pasando por la tierra de cultivo, el clima, hasta las barricas de fermentación y conservación. Este meticuloso estudio ha dado lugar a una de las bebidas más apreciadas del planeta. Curiosamente, España produce el vino más caro del mundo.
En España existen hasta 70 Denominaciones de Origen de vino, un título otorgado a los vinos elaborados con uvas de una misma región. Entre las más reconocidas internacionalmente se encuentran Ribera del Duero, Rioja, Rueda y Jerez. Entre marcas como Protos, Ramón Bilbao, Albariño, Verdejo o Marqués de Cáceres, destaca una en particular por su exclusividad: Aurum Red, conocido por ser el vino más caro del mundo.
En la localidad de Las Pedroñeras, Cuenca, a 160 km de Madrid, conocida más por sus ajos que por el vino, se encuentra la bodega Aurum Red, el sueño hecho realidad de Hilario García, enólogo de tercera generación. «Estoy dedicado al vino. Mis sueños están dentro de esa botella. El precio del vino es lo que menos me importa», dijo García a la BBC en 2019. Estas palabras cobran más sentido al conocer los precios de sus botellas, que varían entre los 100 euros del Aurum Red White de 2016 y los 25,000 euros del exclusivo Aurum Red Gold.
Aurum Red es la firma vinícola en comercialización más cara del mundo, aunque a lo largo de la historia se han vendido botellas exclusivas por cifras más elevadas, como una botella de Domaine de la Romanée-Conti de 1945 subastada en Nueva York hace seis años por más de 550,000 dólares.
Cada botella de Aurum Red Gold, entregada en mano, está adornada con una medalla de dos peces de 18 quilates. «Es el mercado el que ha determinado el precio del vino, yo no tengo mucho que ver con eso», reconoce Hilario García. En sus inicios, cada botella se vendía a 4,000 euros, pero se revendía por hasta 17,000 euros.
Producción exclusiva
El éxito de Aurum Red se atribuye al proceso de maduración y a un innovador tratamiento con ozono. La bodega produce 300 botellas al año, de las cuales solo 150 se ponen a la venta, principalmente a clientes en Japón, China y Estados Unidos. «Aurum Red ha sido envejecido en roble selecto de alta calidad y se le ha transmitido durante 24 meses todos los sentimientos de amor. Aurum Red es el néctar de dioses hecho vino», describe la compañía en su página web.
Hilario García implementó un tratamiento de ozono en el viñedo tras una intensa investigación: «Monté un pequeño laboratorio y busqué formas de aplicar esta técnica de manera más eficiente. Lo usé primero en algunas cebollas que estaba cultivando. Funcionó tan bien que pensé: ¿Por qué no probarlo en las viñas?». El ozono permitió a la uva extraer más nutrientes, resultando en una uva de alta calidad.
Una característica única de Aurum Red es que su sabor varía según el giro de la copa: «Girando a la derecha podrás percibir pan de higos, aromas de breva, sobremaduración, notas especiadas, aroma lineal y fruto seco maduro. Girando hacia la izquierda percibirás más finura, aromas más sutiles, más aromas de cassis, tostado, cacao, frutas pequeñas maduras y arándanos».
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