Linda Yaccarino, quien ocupaba el cargo de CEO de X (antes Twitter) desde mayo de 2023, ha anunciado este miércoles su dimisión tras dos años en el puesto. La ejecutiva estadounidense, de 61 años, comunicó su decisión a través de una publicación en su perfil de la propia red social, propiedad de Elon Musk, sin ofrecer más detalles sobre los motivos de su salida.
“Tras dos años increíbles, he decidido dejar mi puesto como CEO de X”, escribió Yaccarino, en un mensaje en el que agradeció a Musk por confiarle la “extraordinaria misión” de proteger la libertad de expresión, transformar la empresa y convertirla en la llamada ‘App para todo’.
El anuncio llega en un momento delicado para Musk, quien se encuentra enfrentado públicamente con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mientras Tesla sufre una notable caída en ventas. Además, X ha sido objeto de críticas recientes tras la publicación de contenidos «inapropiados» generados por Grok, el chatbot de la plataforma, tras una actualización que permitía respuestas “políticamente incorrectas, pero fundamentadas”.
En su mensaje de despedida, Yaccarino definió X como “la plaza pública digital para todas las voces y la señal cultural más poderosa del mundo”, y atribuyó los logros de la plataforma al apoyo de sus usuarios, socios comerciales y del “equipo más innovador del mundo”.
Elon Musk guarda silencio ante la incertidumbre
Elon Musk, quien compró Twitter en octubre de 2022 por 44.000 millones de dólares (unos 37.510 millones de euros) y la rebautizó como X, respondió brevemente a la publicación de Yaccarino agradeciendo “sus contribuciones”, sin revelar quién asumirá el liderazgo de la empresa ni cuál será el futuro inmediato de la red social.
Desde que asumió el control de la plataforma, Musk ha impulsado cambios estructurales radicales, incluido el despido de los principales ejecutivos de la antigua Twitter y una transformación del modelo de negocio orientado a convertir X en un ecosistema multifuncional.
Antes de llegar a X, Yaccarino se desempeñaba como directora de publicidad de NBCUniversal, y su llegada a la compañía fue vista como un intento de profesionalizar la gestión y atraer grandes anunciantes, en un momento en el que X enfrentaba un entorno empresarial complejo tras la compra por parte de Musk.
Con su salida, el futuro inmediato de la dirección de X queda en el aire, mientras la plataforma continúa bajo la lupa por sus decisiones editoriales, su modelo de moderación de contenidos y su viabilidad comercial.
© Reproducción reservada