Durante el debate que tuvo lugar ayer, 10 de septiembre, en el Constitution Center de Filadelfia, entre los candidatos a la presidencia de EE. UU., Kamala Harris y Donald Trump, estos intercambiaron fuertes acusaciones sobre temas clave. Entre ellos, los más destacados son la economía, el aborto y la política exterior.
En primer lugar, el republicano criticó lo que calificó como una falta de propuestas económicas por parte de su oponente, argumentando que esta le había plagiado las políticas a Joe Biden. «Ella no tiene un plan. Copió el plan de Biden, y es como 4 oraciones… 4 oraciones que dicen: ‘Oh, intentaremos bajar los impuestos’, No tiene un plan».
A esto, Harris respondió asegurando que su administración ha trabajado duro para reparar los daños causados durante el mandato de su rival. «Donald Trump nos dejó el peor desempleo desde la Gran Depresión, la peor epidemia de salud pública en un siglo y el peor ataque a nuestra democracia desde la Guerra Civil. Lo que hemos hecho nosotros es limpiar su desastre».
Tras esto, el expresidente acusó abiertamente a la vicepresidenta de ser marxista, lo cual provocó que esta se carcajeara en un gesto de rechazo a tal idea. «Es una marxista, todo el mundo lo sabe. Su padre es profesor marxista de economía y le enseñó bien».
En otro momento, Trump abordó el tema de la inmigración estableciendo una teoría sobre los extranjeros haitianos asentados en Ohio. Este afirmó que los recién llegados a EE. UU. «están comiéndose a los perros, gatos y otras mascotas que viven allí». Sin embargo, estas declaraciones fueron rápidamente condenadas y desmentidas por el moderador del debate. Este recordó que las autoridades locales de Springfield ya refutaron tales acusaciones en el pasado.
En este sentido, Harris afirmó: «Eso es algo extremo», a lo cual añadió: «Les diré algo: él va a hablar mucho sobre inmigración esta noche, incluso cuando ese no sea el tema que se está planteando».
El candidato republicano también arremetió contra la demócrata, aseverando: «Está destruyendo este país y, si llega a ser presidenta, EE. UU. no tiene ninguna posibilidad de éxito. Este terminará siendo Venezuela con esteroides».
En otro orden de cosas, uno de los intercambios más polémicos entre los 2 ponentes giró en torno a las elecciones de 202, cuando Trump volvió a negar su derrota en las urnas y reiteró sus afirmaciones de fraude electoral. «Mira, hay tantas pruebas. Todo lo que tienes que hacer es verlo… Obtuve casi 75 millones de votos, la mayor cantidad que cualquier presidente en funciones haya recibido. Me dijeron que si conseguía 63 millones, que fue lo que hice en 2016, no podría ser derrotado».
Además de abordar las elecciones pasadas, los candidatos a la presidencia discutieron sobre varios temas relativos a la política exterior norteamericana. Concretamente, Harris acusó a Trump de ser una figura risible en el escenario internacional. «He viajado por todo el mundo como vicepresidenta de EE. UU. y los líderes mundiales se ríen de Donald Trump. He hablado con líderes militares, algunos de los cuales trabajaron con usted, y dicen que es una vergüenza. Estos dictadores y autócratas está deseando ver que usted vuelva a ser presidente porque saben que lo pueden manipular con halagos y favores». «Si Donald Trump fuera presidente, Putin estaría sentado ahora mismo en Kiev». Asimismo, sentenció: «Creo que la razón por la que Trump dice que sesta guerra terminaría en 24 horas es porque simplemente les abandonaría».
Por su parte, el expresidente le replicó a la vicepresidenta por interrumpirlo en varias ocasiones: «Un momento, estoy hablando ahora, si no te importa, por favor». Rematando estas palabras con una referencia a un intercambio similar a este que Harris tuvo en 2020 con el entonces vicepresidente Mike Pence. «¿Te resulta familiar?».

Mike Pence
Por lo que respecta a la relación entre EE. UU. e Israel, el republicano acusó a la demócrata de no apoyar al principal aliado del país en Oriente Medio. «Ella odia a Israel. Si es presidenta, creo que Israel dejará de existir en 2 años».
Harris rechazó esta afirmación, calificándola de «absolutamente falsa» y destacó su apoyo a Israel a lo largo de su carrera política y su vida personal. «Esto debe terminar de inmediato, y la forma en que lo hará es firmar un acuerdo de alto al fuego y que los rehenes sean liberados».
La discusión sobre el aborto también fue un punto de fricción entre ambos candidatos. Por su parte, Trump defendió que la decisión sobre este derecho debería estar en manos de los estados, tras haber impulsado la derogación del mismo a nivel federal. Harris criticó esta postura, acusando a su oponente de mentir y aseverando que sus políticas son «insultantes para las mujeres estadounidenses».
Cerca del final de debate, la vicepresidenta le recordó a su rival que ya no estaba compitiendo contra Joe Biden, quien dejó la carrera presidencial. «Es importante recordarle al expresidente que no está compitiendo contra Biden, sino contra mí».

Joe Biden
Finalmente, Trump concluyó su intervención, calificando su propio desempeño como el mejor que ha tenido hasta la fecha. Además, criticó a los moderadores de ABC por favorecer a Harris. «¡Creo que este ha sido mi mejor debate de todos! Especialmente, porque ha sido 3 contra 1», indicó en sus redes sociales.
Minutos después de que se publicara este mensaje, la campaña de Kamala Harris desafió a Donald Trump a un segundo enfrentamiento presidencial. «Bajo las luces brillantes, el pueblo estadounidense pudo ver la elección que se producirá este otoño en las urnas: avanzar con Harris o retroceder con Trump». «Eso fue lo que han visto esta noche y lo que debería ver en un segundo debate en octubre. La vicepresidenta está lista para ello. ¿Lo está Trump?».
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