GettyImagenLa Comisión Europea ha dado luz verde a la adquisición de Banco BPM por parte de UniCredit, aunque con importantes condiciones. Para que la operación reciba la aprobación definitiva, UniCredit deberá vender 209 sucursales físicas en Italia para evitar problemas de competencia derivados de la concentración excesiva en ciertas zonas del territorio italiano.
El Ejecutivo comunitario ha rechazado además una solicitud de la autoridad italiana de competencia, que pedía que la fusión fuera evaluada bajo la legislación nacional. Bruselas ha defendido su competencia para decidir sobre este caso, alegando que su experiencia en el sector bancario garantiza una evaluación adecuada.
La cesión de sucursales que propone UniCredit responde a las preocupaciones de Bruselas, que tras someter la operación a un test de mercado concluyó que esta medida soluciona los posibles riesgos competitivos. Inicialmente, los servicios comunitarios temían que la fusión pudiera provocar un aumento de precios y limitar la competencia en los mercados de depósitos y préstamos, tanto para consumidores minoristas como para pequeñas y medianas empresas (pymes), ya que identificaron solapamientos en las actividades y sucursales de ambas entidades en 181 zonas locales.
A nivel regional, la Comisión consideró que no existían riesgos significativos, debido a la presencia de varios competidores consolidados que seguirán activos tras la operación. Tampoco se detectó riesgo de coordinación en el mercado bancario italiano que pudiera afectar negativamente a la competencia.
“La Comisión tiene un interés especial en preservar la competencia en sectores clave como la banca y los seguros, vitales para el desarrollo económico de la Unión de Mercados de Capitales y la Unión de Ahorro e Inversión”, destacó el Ejecutivo comunitario en su comunicado oficial, justificando así su decisión de no remitir el caso a la autoridad nacional italiana.
Con esta autorización condicionada, la fusión entre UniCredit y Banco BPM avanza, pero queda pendiente la ejecución de las medidas exigidas para garantizar un mercado bancario competitivo en Italia.
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