Campofrío, perteneciente al grupo mexicano Sigma, anunció la construcción de una nueva planta de elaborados cárnicos en Utiel, Valencia, con una inversión que alcanzará los 134 millones de euros.
Este nuevo centro sustituirá a la fábrica ubicada en Torrent, a unos 80 kilómetros de distancia, que fue gravemente afectada por la dana ocurrida en octubre pasado, afectando a más de 300 trabajadores.
La empresa señaló que este proyecto representa un “compromiso firme” con su plantilla y un refuerzo de su estrategia para mantener y revitalizar la presencia industrial en la provincia valenciana.
La nueva instalación contará con una mayor capacidad productiva, diseñada para ajustarse a la creciente demanda del mercado de elaborados cárnicos, tanto en España como en Europa.
Además, la fábrica incorporará tecnología avanzada y procesos de última generación que mejorarán la eficiencia y la flexibilidad productiva.
Su ubicación en Utiel facilitará una mejor conectividad logística, permitiendo un acceso más cercano a centros de distribución y a la industria auxiliar agroalimentaria, lo que supone una ventaja competitiva para la compañía.
Proyectos de Campofrío
Paralelamente, Campofrío destinará otros 23 millones de euros para ampliar las líneas de producción en su planta de La Bureba, en Burgos, con el objetivo de acelerar la recuperación industrial y fortalecer la competitividad del grupo.
Esta inversión total de 157 millones de euros está pendiente de avances en las negociaciones con las administraciones públicas para obtener incentivos y ayudas que hagan viable la ejecución del proyecto dentro de los plazos previstos.
El consejero delegado de Campofrío, Javier Dueñas, resaltó la colaboración entre las administraciones, sindicatos y trabajadores en un momento complicado tras los daños en Torrent.
“Este apoyo ha sido fundamental para avanzar con nuestro plan y reforzar el compromiso del grupo con España como pilar clave de nuestra actividad industrial en Europa”, afirmó.
Este nuevo proyecto se suma al precedente de la planta burgalesa, reconstruida tras un incendio en 2014 y reinaugurada en 2016, demostrando la resiliencia y apuesta continuada de Campofrío por la modernización y la expansión de su capacidad productiva.
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