El multimillonario mexicano Carlos Slim ha dado un paso significativo en el mercado de telecomunicaciones europeo al adquirir una participación del 3,2% en el gigante británico BT Group. Esta inversión, valorada en aproximadamente 400 millones de libras, coloca a Slim entre los principales accionistas de BT junto a Altice UK y Deutsche Telekom.
Un movimiento estratégico
La operación fue confirmada por BT a través de un comunicado oficial, en el que se detalló que la participación fue adquirida por Inbursa y sus subsidiarias, empresas de inversión propiedad de Slim y su familia. Este movimiento refuerza la influencia de Slim en el sector de telecomunicaciones global, un ámbito donde ha acumulado vastas riquezas y experiencia a través de América Móvil, su empresa insignia en México.
La visión europea de Slim
No es la primera incursión de Slim en el mercado europeo. Anteriormente, América Móvil ha tenido participaciones significativas en KPN de los Países Bajos y Telekom Austria. La adición de BT Group a su portafolio subraya la confianza de Slim en el potencial a largo plazo de las telecomunicaciones europeas. Desde BT, han manifestado su satisfacción por la llegada de Slim, destacando que «cualquier inversor que reconozca el valor a largo plazo de nuestro negocio» es bienvenido, y han expresado su disposición a «colaborar con Inbursa, tal como lo hacemos con todos nuestros inversores».
Con esta adquisición, Slim se une a un selecto grupo de inversores destacados en BT. Patrick Drahi, magnate francés y propietario de Altice UK, mantiene una participación del 24,5% desde mayo de 2023, lo que lo convierte en el mayor accionista individual de la compañía. Deutsche Telekom, por su parte, posee una participación menor pero significativa, consolidando su influencia en el mercado británico.
Apoyo a la nueva estrategia de BT
La entrada de Slim llega en un momento crucial para BT, que está implementando una nueva estrategia bajo la dirección de su CEO, Allison Kirkby. Kirkby ha fijado como objetivo lograr ahorros de costes anuales de 3.000 millones de libras (3.550 millones de euros) en los próximos cinco años, como parte de un plan integral para revitalizar la compañía. La inversión de Slim podría verse como un respaldo a estos planes, proporcionando un impulso adicional a los esfuerzos de BT para modernizar y optimizar sus operaciones.
La presencia de Carlos Slim en el accionariado de BT Group no solo refuerza la estabilidad financiera de la empresa, sino que también abre la puerta a posibles colaboraciones y sinergias en el futuro. Con su vasta experiencia y visión estratégica, Slim podría desempeñar un papel crucial en la transformación y el crecimiento continuo de BT, asegurando que la empresa se mantenga a la vanguardia en el competitivo mundo de las telecomunicaciones.