Room Mate logra entrar en el sector de lujo tras aumentar sus ventas en un 37%. Transcurrido un año y medio tras la adquisición por Angelo Gordon y Westmont Hospitality, la hotelera comienza su proceso de profunda transformación e impulsa la firma de lujo Collection.
La compañía logra cerrar el año 2023 con beneficios y además centrarse en el segmento del lujo para hoteles cuatro estrellas plus. La nueva marca se enfocará en hoteles de menos de 80 habitaciones con la misma esencia de Room Mate, pero con una decoración más serena y elegante y una atención al cliente más personalizada.
Se trabajará por no perder su insignia y sus factores clave, como la localización o el confort, señas de identidad de la empresa. Una nueva imagen de marca pero sin perder el sello de referencia que los impulsó hasta el éxito hotelero internacional.
Room Mate también está trabajando en nuevas ideas de innovación en atención al cliente o mejoras tecnológicas para que, en palabras de Sarasola, “el viaje pre, durante y post de nuestro cliente sea siempre una experiencia única”.
A los dos primeros de la marca Gerard (66 habitaciones) en Barcelona y Giulia (85 habitaciones) en Milán, se sumarán otro par más que impulsarán este nuevo modelo. Pese a todo, Room Mate está en negociaciones de nuevas compras, alquileres y gestione en el centro de ciudades prestigiosas de Europa como Londres, París, Roma, Milán, Sicilia, Berlín, Hamburgo o Munich.
De hecho, en Italia, proyectan ente tres y cinco hoteles, experimentando un incremento de ADR (tarifa media diaria) allí. En concreto, del 21% en Milán, 28% en Roma y casi un 40% en Florencia.
Su optimista balance económico
Room Mate Hotels ha cerrado 2023 con cero deuda y una facturación normalizada de 106,5 millones de euros. De hecho, se prevé que se incremente hasta los 150 millones de euros en 2024, una vez que todos los hoteles estén reformados y abiertos al 100%.
Es una combinación de la situación global, pero también del trabajo bien hecho y del reposicionamiento de activos que están llevando a cabo con el respaldo de los propietarios de la cadena, que van a destinar más de 16 millones de euros hasta 2025.
Su propietario, Kike Sarasola, subraya: “Hemos venido confirmando la rentabilidad de la fórmula visionaria y disruptiva de la cadena, que siempre ha puesto el foco en la felicidad de los clientes. Nuestro objetivo de expansión ahora pasa por hacer crecer la marca Room Mate Collection y por seguir ampliando mercado en Europa”.
Sus perspectivas de futuro
Con un crecimiento más sostenido, han mantenido un Ebitda normalizado de más del 30% con respecto al mismo periodo del año anterior. Destaca especialmente el empuje de los hoteles españoles, que crecen muy por encima del doble dígito, con incrementos superiores al 20% en Málaga (más del 27%) o Madrid (más del 21%).
En los dos próximos años pretende así consolidar las cifras alcanzadas en 2023, cuando más de 2,4 millones de personas han disfrutado de sus hoteles, siendo el 91% clientes internacionales, con una edad media de entre 25 y 54 años.
Sarasola comenta: “Estamos creciendo en un tipo de cliente más maduro que exige otro nivel de calidad y de lujo que va relacionado con nuestro crecimiento en ADR y en ventas en las diferentes nacionalidades de procedencia”.
Entre las nacionalidades clientes habituales destacan especialmente: la estadounidense, con un 14% de facturación, seguida de la holandesa (10%, gracias al óptimo comportamiento de los hoteles de Amsterdam y Rotterdam), española (9%) y británica (8%). Para 2024 la compañía prevé un retorno claro del cliente chino, que en este primer trimestre ya se ha situado en la tercera posición en ventas, seguido de brasileños y kuwaitíes.
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