El Banco Central Europeo (BCE) decidió este jueves reducir en 25 puntos básicos los tres tipos de interés oficiales.
Esta decisión, que entrará en vigor el próximo 5 de febrero, responde a una evaluación actualizada de la inflación y a la evolución de las condiciones económicas en la eurozona.
Con esta medida, el tipo de interés de la facilidad de depósito baja al 2,75 %, el de las operaciones principales de financiación al 2,90 % y el de la facilidad marginal de crédito al 3,15 %.
Aunque la inflación interna sigue siendo elevada debido a la persistente presión salarial y los ajustes de precios en algunos sectores, el BCE considera que la inflación general está convergiendo hacia su objetivo del 2 % a medio plazo.
A través de una nota de prensa, el BCE destaca que el proceso de desinflación sigue avanzando y que la inflación se mantiene en línea con las previsiones.
Esto refuerza la expectativa de que el 2 % será alcanzado de manera sostenida en los próximos meses.
Sin embargo, advierte que algunos factores internos, como el crecimiento de los salarios, continúan ejerciendo presión sobre los precios.
A pesar de la bajada de los tipos, las condiciones de financiación siguen siendo restrictivas, en parte debido a la transmisión de las anteriores subidas de tipos y al proceso de renovación de créditos a tasas más elevadas.
No obstante, la mejora del poder adquisitivo de los hogares y la reducción progresiva de los efectos de la política monetaria restrictiva deberían impulsar una recuperación gradual de la demanda en la eurozona.
Los próximos pasos del BCE
El organismo también informó que tanto el Programa de Compras de Activos (APP) como el Programa de Compras de Emergencia frente a la Pandemia (PEPP) están disminuyendo su tamaño de manera predecible, sin reinvertir el principal de los valores que van venciendo.
Además, el 18 de diciembre de 2024, las entidades bancarias reembolsaron los importes pendientes de las operaciones de financiación a largo plazo con objetivo específico (TLTRO), cerrando así esta herramienta dentro del proceso de ajuste del balance del BCE.
El Consejo de Gobierno reiteró su compromiso de asegurar que la inflación se mantenga de manera estable en torno al 2 % en el medio plazo.
Para ello, seguirá adoptando un enfoque dependiente de los datos, evaluando en cada reunión los nuevos indicadores económicos y financieros antes de decidir la orientación futura de la política monetaria.
Asimismo, el BCE dijo que mantiene disponible el Instrumento para la Protección de la Transmisión, destinado a evitar turbulencias en los mercados que puedan poner en riesgo la estabilidad de la eurozona.
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