GettyImages¿Quién no ha trasnochado para ver un partido de la NBA o para disfrutar del llamativo espectáculo de la Super Bowl? Hace ya algunos años que la popularidad de las ligas de baloncesto y fútbol americano ha traspasado las fronteras de Estados Unidos. Estos deportes envueltos en puro show no paran de crecer a nivel internacional, y muchas competiciones europeas ya están comenzando a imitar el modelo americano de convertir los eventos deportivos en auténticas experiencias.
No hay ninguna duda de que la NBA y la NFL tienen mucha más influencia en España que hace 10 o 20 años. Diferentes factores han conseguido atrapar al consumidor español y familiarizarlo con el deporte americano, al punto de llevarlo a seguir más de cerca las competiciones estadounidenses que las ligas nacionales. La forma en la que entendemos el deporte está cambiando, y este crecimiento exponencial no hubiera sido posible sin el auge de las redes sociales, que han convertido estos eventos en toda una necesidad para el público joven. En los últimos años, estamos comprobando cómo los campeonatos y clubes españoles están comenzando a intensificar su presencia en redes como Instagram, Twitter o TikTok, con el objetivo de crear comunidades y expandir su target.
La NBA y la NFL han sido pioneros en reinventar el conocido matchday, ofreciendo antes, durante y después de los partidos diferentes espectáculos, retos o juegos. Estas ideas permiten revalorizar la marca de la competición y garantizar una experiencia única al aficionado, más allá del resultado del evento. Estas ideas han comenzado a llevarse a cabo en Europa y España, donde ya es común escuchar música en los recintos y disfrutar de diversos eventos en los descansos o tiempos muertos. Siguiendo esta misma línea, los clubes también han comenzado a incorporar temáticas especiales como partidos solidarios o de leyendas al más puro estilo americano, asemejándose a eventos populares como el All-Star.
NBA
Lógicamente, la monetización y el merchandising han sido una de las vías que más se ha extendido en el Viejo Continente. Los equipos y competiciones se esfuerzan cada vez más en revalorizar su marca y potenciar el desarrollo de la venta de productos. Ofrecer una amplia gama de artículos personalizados es una estrategia fundamental para generar ingresos adicionales, a la vez que refuerza la identidad de marca y ayuda a la fidelización de aficionados.
UN MODELO DE NEGOCIO FIRME
A pesar de formar parte de dos deportes muy distintos, la NBA y la NFL comparten muchas características. Una de ellas es el formato de competición. Las franquicias se dividen en dos Conferencias y compiten la mayor parte de la temporada en una fase regular de liga, todo para clasificar al evento más esperado del año: los playoffs. Este formato de competición permite a los aficionados mantener el interés durante todo el año, ya que implica a muchos más equipos en la lucha por el campeonato que en una liga convencional. Los playoffs por el título también han llegado al baloncesto europeo, y actualmente lo adoptan tanto la Euroliga como la Liga ACB de España.
La NFL y la NBA siguen un sistema de franquicias, lo que significa que los equipos son propiedades con derechos territoriales exclusivos, es decir, no tienen rivales locales. Además, siguen estrictos límites salariales con el objetivo de salvaguardar la viabilidad financiera de la competición. Otra de las particularidades más interesantes del modelo americano es su sistema de draft. Ambas competiciones reclutan anualmente jóvenes talentos provenientes de universidades y otras ligas, algunas europeas. Un procedimiento competitivo que permite a Estados Unidos potenciar el deporte universitario, formar a las nuevas generaciones, atraer talento extranjero y consolidar su posición de país con mayor éxito olímpico.
Este modelo está perfectamente sustentado por diversas fuentes de ingresos, fundamentalmente patrocinios, acuerdos televisivos y venta de entradas. La NFL cerró el 2023 como la competición deportiva con más ingresos en todo el mundo, con un total de 18,7 mil millones de dólares, según informes de Nielsen Media Research, líder mundial en medición de audiencias, datos y análisis. De esta cantidad, un 66% proviene exclusivamente de derechos televisivos a nivel nacional, siendo la liga que más genera en este aspecto con mucha diferencia. Esto se debe a que la NFL es muy potente en EE.UU., liderando las audiencias con un total de 9,2 millones de espectadores por encuentro. Estos números justifican sus altos ingresos televisivos, registrando una media de 711.000 por partido. El 18% de los ingresos de la NFL corresponde al ticketing, mientras que el 16% restante se debe a patrocinadores.
Jayson Tatum (NBA)
Esto es muy diferente en la NBA. La liga americana de baloncesto cerró el curso 2023 con un total de 10,9 mil millones de dólares en términos de ingresos, 7,8 mil millones menos que la NFL. El mayor sustento económico de la NBA también son los acuerdos televisivos, que representan un 41% del total de sus ingresos. Pese a que el fútbol americano domina con puño de hierro el mercado nacional, la expansión internacional ha permitido a la NBA aumentar significativamente sus ingresos televisivos en estos últimos años. De hecho, esto le permite ser un mercado más interesante para las marcas extranjeras, y diferentes patrocinadores de alto valor llaman a la puerta interesados en la visibilidad a nivel mundial que ofrece la competición. Recientemente, se han cerrado acuerdos millonarios con patrocinadores como Crypto.com, que pagó a Los Angeles Lakers 36,3 millones de dólares, o Chase, que reportó a Golden State Warriors 29,6 millones de dólares.
PLANES PARA CONQUISTAR EUROPA
El comisionado de la NBA, Adam Silver, anunció en marzo un auténtico bombazo que ha puesto patas arriba el panorama del baloncesto europeo y mundial. Junto al secretario nacional de la FIBA (Federación Internacional de Baloncesto), Andreas Zakglis, informaron de la aprobación del plan para poner en marcha una liga de la NBA en Europa. Ambos declararon que este proyecto es el siguiente paso para continuar desarrollando el baloncesto en el Viejo Continente.
Por el momento existen pocas certezas al respecto, pero tanto Adam Silver como Andreas Zakglis han dejado muy claro que llevan algunos años estudiando detenidamente el mercado y que este proyecto ya cuenta con el visto bueno de socios, clubes e incluso patrocinadores y agencias de publicidad. Por tanto, parece que esta respuesta positiva ha sido definitiva para que la NBA se lance a expandir su mercado en Europa de la mano de la FIBA. En los últimos años, la liga americana de baloncesto había dado el paso de celebrar algunos encuentros de temporada regular en el Viejo Continente, con el objetivo de promover la competición más allá de sus fronteras y consolidarse como una liga global. En 2011, Brooklyn Nets y Toronto Raptors protagonizaron el primer encuentro oficial de la NBA en Europa; a día de hoy, ya se han celebrado un total de 15. La última gran ciudad europea que acogió encuentros de fase regular fue París, que presentó un Accor Arena abarrotado para recibir a Indian Pacers y, especialmente, a los San Antonio Spurs del icono francés Victor Wembanyama.
NFL
El último gran evento de la NBA celebrado en España tuvo lugar en 2023, cuando el Real Madrid se enfrentó en un amistoso a los Dallas Mavericks de Luka Doncic. La buena relación del esloveno con el club merengue puede facilitar que la franquicia angelina visite la capital de España próximamente. Más allá del nuevo proyecto, es toda una certeza que la NBA disputará muy pronto partidos oficiales en España. De hecho, el propio comisionado planteó organizar una semana completa de partidos de fase regular en diferentes ciudades europeas, de modo que Madrid y Barcelona se postulan como serias candidatas a acoger alguno de estos encuentros. La NBA seguirá desarrollando encuentros oficiales en el Viejo Continente cada vez con más frecuencia; sin embargo, parece que el nuevo proyecto de crear una liga en Europa centra toda su atención. El apoyo de la FIBA y la gran acogida de los últimos tours han sido los detonantes perfectos para que la NBA se haya decidido a llevar a cabo este proyecto y a implantar franquicias por toda Europa.
Esta estrategia se asemeja al proyecto que lanzó la NFL a finales del siglo XX. Con el objetivo de transmitir la pasión por el fútbol americano fuera de EE.UU. y expandir la competición a nivel global, nació la World League of American Football, una liga que en 1998 pasó a contar únicamente con equipos europeos y a denominarse NFL Europa. Esta competición tocó muy de cerca a nuestro país, ya que una de las franquicias residía en la Ciudad Condal, los Barcelona Dragons. Este equipo tiene el honor de ser el único club español que ha participado en competiciones de la NFL, hasta su cierre y traslado a Alemania en 2003. De hecho, la franquicia catalana fue capaz de levantar la denominada World Bowl en 1997 y coronarse campeones. En 2001 firmó un contrato de asociación con el FC Barcelona y pasó a vestir sus colores y a disputar sus encuentros en el Miniestadi. Sin embargo, el proyecto de la NFL en Europa registraba unas pérdidas anuales de 30 millones, una cifra insostenible a largo plazo. Por tanto, la liga puso punto y final en 2007.
Tras esta infructuosa experiencia, la NFL ha puesto el foco en seguir celebrando encuentros en ciudades europeas para expandir su producto, al igual que ha hecho la propia NBA. La competición indicó que a finales de este año los Miami Dolphins viajarán a Madrid para disputar un partido de liga regular en el Santiago Bernabéu. El director de la NFL, Peter O’Reilly, ha explicado que apuestan por mercados como España o Brasil por “la gran cantidad de aficionados en comparación con la población total”. Este escenario nos lleva a preguntarnos si la NBA tomará como ejemplo la NFL Europa y aprenderá de los errores cometidos, o si, por el contrario, apostará por un proyecto disruptivo y novedoso.