Nvidia ha vuelto a hacer historia. La compañía líder en semiconductores cerró este miércoles en la Bolsa de Nueva York con una capitalización bursátil superior a los 3,76 billones de dólares, marcando un máximo histórico y consolidando su posición como la empresa más valiosa del mundo, por delante de gigantes como Microsoft y Apple.
En una jornada de escaso brillo para el mercado estadounidense, las acciones de Nvidia subieron un 4,33%, alcanzando los 154,31 dólares por título. Este nuevo salto se produce tras una revalorización de más del 14% desde la publicación de sus resultados trimestrales a finales de mayo, que superaron con creces las expectativas de los analistas.
El CEO de Nvidia, Jensen Huang, atribuyó este crecimiento al auge imparable de la inteligencia artificial (IA): “La demanda por nuestra infraestructura de IA sigue siendo increíblemente fuerte”, declaró, destacando los acuerdos cerrados en mercados como Taiwán y los Emiratos Árabes Unidos, a pesar de las recientes restricciones a la exportación impuestas por Estados Unidos en relación con China.
Estas limitaciones están relacionadas con el rápido desarrollo de startups chinas como DeepSeek, que han logrado construir modelos de IA competitivos usando chips menos avanzados —incluidos algunos modelos de Nvidia—, lo que ha generado preocupación en Washington.
A pesar de la volatilidad experimentada a principios de año —cuando Nvidia perdió cerca de 600.000 millones de dólares en valor bursátil—, los analistas siguen confiando en su proyección a largo plazo. “Nvidia mantiene un crecimiento de beneficios muy sólido, lo que sigue atrayendo inversores tanto nuevos como recurrentes”, afirmó Sam Stovall, analista de CFRA.
Con este nuevo récord, Nvidia no solo domina el mercado tecnológico, sino que refuerza su papel como pilar clave del futuro digital global, impulsado por la IA generativa, la computación de alto rendimiento y las infraestructuras de datos de próxima generación.
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