GettyImagenFox Corporation cerró su tercer trimestre fiscal de 2025 con un beneficio neto atribuido de 346 millones de dólares (unos 311 millones de euros), lo que supone un retroceso del 48% respecto al mismo periodo del año anterior.
La caída de las ganancias contrasta con el notable incremento de los ingresos, que se situaron en 4.371 millones de dólares (3.933 millones de euros), un 26,8% más interanual.
El aumento de la facturación estuvo impulsado, principalmente, por la televisión en abierto, que generó 2.704 millones de dólares, un 39,5% más, gracias al fuerte tirón de los derechos deportivos, especialmente los vinculados a la Super Bowl LIX.
Por su parte, el negocio de televisión por cable también creció, aunque a un ritmo más moderado, hasta alcanzar los 1.636 millones de dólares, lo que representa un incremento del 11,1%.
En el desglose del resto de ingresos, los conceptos corporativos y otros aportaron 58 millones de dólares, mientras que las eliminaciones contables restaron 27 millones.
Fox en lo negativo
Pese al dinamismo en los ingresos, los gastos totales se dispararon un 56,8%, hasta los 3.897 millones de dólares (3.506 millones de euros).
Este incremento se debe, en gran medida, al encarecimiento de los derechos de emisión deportiva, así como a un mayor gasto en marketing y operaciones digitales.
En el acumulado de los primeros nueve meses del ejercicio fiscal, Fox obtuvo un beneficio neto de 1.546 millones de dólares (1.391 millones de euros) y generó ingresos por 13.013 millones de dólares (11.708 millones de euros), lo que supone subidas interanuales del 30,8% y 19,5%, respectivamente.
El presidente y consejero delegado de Fox, Lachlan Murdoch, valoró positivamente estos resultados pese a la caída del beneficio trimestral.
“La solidez de nuestro tercer trimestre fiscal pone de relieve el papel central que desempeña Fox en la información y el entretenimiento en Estados Unidos. Nuestros resultados financieros, que destacan por un cash flow récord, ilustran una vez más la fortaleza de Fox”.
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