La Comisión de Bolsa y Valores (SEC) ha respaldado la adquisición por parte de Iberdrola del 18,4% del capital de Avangrid que esta aún no posee y le ha dado el visto bueno a la fusión entre ambas compañías. La eléctrica española espera cerrar esta operación de adquisición a finales del año en curso (durante el último cuarto de 2024).
El documento en cuestión ha sido ratificado por el Comité Especial de la mentada fusión, formado por consejeros independientes de Avangrid y el banco de inversión Moelis, contratado por el mencionado Comité. Morgan Stanley es el asesor de Iberdrola en la compra y, tanto este como Moelis, consideran que el acuerdo es justo para los accionistas y la matriz desde el punto de vista financiero.
No obstante, la compañía que dirige Ignacio Sánchez Galán tiene varios obstáculos que salvar antes de dar esta adquisición por segura. Avangrid ha fijado una Junta General de Accionistas Extraordinaria para el 26 de septiembre. En ella, la mayoría de los propietarios de títulos de la mentada empresa, entre los que se encuentran varios fondos, tales como Vanguard, BlackRock o Atlas Infraestructure, deben dar su visto bueno. Para convencerlos, en mayo, Iberdrola alcanzó un acuerdo con ellos al elevar al 8,6% su propuesta de retribución por acción hasta que estas llegaron a los 35,75 dólares cada una. Esto se traduce en una inversión de unos 2.348 millones de euros.
Por otro lado, la Federal Energy Regulatory Comission (FERC), la Maine Public Utilities Comission (MPUC) y la New York Public Service Comission (NYPSC) también deben aprobar la OPA para que esta pueda ser factible.
Con esta, Iberdrola pretende reforzar su posición en los activos de redes eléctricas de EE. UU., así como reducir la complejidad que supone tener una filial que cotiza en Bolsa para poder asignarle el capital que esta necesitará con el objetivo de expandirse desde la matriz en los próximos años. Además, en su revisión estratégica de 2023, Iberdrola confirmó que el mercado no les atribuye su valor total a las acciones de Avangrid, lo cual podría impactar en la actual política de dividendos de la filial. Es por ello que, después de cerrar la operación de compra, se solicitará la exclusión de la mentada filial de la Bolsa de Nueva York.
Hasta que la mentada transacción finalice, Avangrid continuará pagando dividendos trimestrales por un importe de 0,440 dólares por acción. Esto supone un pago de casi 31,5 millones (28,26 millones de euros) por cada trimestre a los accionistas minoritarios de la mencionada empresa. Asimismo, si se cumplen los plazos de la firma de la OPA, y esta se cierra el 31 de diciembre, los propietarios de títulos de Avangrid recibirán, al menos, 94,5 millones de dólares.
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