Indra quiere quedarse con el Ferrari de los blindados europeos: puja por Iveco Defence Vehicles

Indra, ivecoIveco

Indra va a por todas en su ambición de convertirse en referente de la defensa terrestre en Europa. La compañía española ha presentado una oferta no vinculante para hacerse con Iveco Defence Vehicles (IDV), la división militar del grupo italiano Iveco y uno de los fabricantes de blindados más codiciados del continente.

La cosa no va a ser fácil. Según fuentes a las que ha accedido elEconomista.es Indra está en la recta final del proceso de compra, compitiendo con pesos pesados como el consorcio Leonardo-Rheinmetall, el fondo Bain Capital y una firma australiana aún sin identificar.

¿Por qué tanto interés? Porque IDV no es un jugador cualquiera. Tiene ingresos anuales superiores a los 1.000 millones de euros, una cartera de pedidos por valor de 4.000 millones y clientes de primer nivel como los ejércitos de EE. UU., Alemania, Italia, Brasil y, por supuesto, España.

Entre otros vehículos, IDV fabrica el Centauro 8×8, un blindado clave para el Ejército de Tierra español, sobre todo en unidades como el Regimiento de Caballería en Huesca. También produce otras bestias militares como el anfibio 8×8 Superav, el 6×6 Guarani, y los vehículos ligeros LMV Guaicurus, conocidos por su alta movilidad y blindaje reforzado.

El precio de la operación podría rondar los 1.000 millones de euros, según los analistas. Si se alcanza esa valoración, Iveco podría descartar su idea inicial de sacar IDV a bolsa y optar directamente por venderla al mejor postor. Detrás de Iveco está Exor, el holding de la familia Agnelli (sí, los dueños de Ferrari y Fiat), que ahora quiere mejorar su posición en el índice bursátil MSCI World.

Leonardo-Rheinmetall, el rival a batir

La dupla Leonardo-Rheinmetall, que nació en febrero de este año bajo el nombre LRMV, no se está quedando atrás. Ha fichado a UBS como asesor financiero y su CEO, Roberto Cingolani, ha confirmado que van en serio: “Es una inversión industrial, no financiera”. Además, Leonardo viene con el bolsillo lleno tras vender su parte en la estadounidense RADA Electronic Industries por 340 millones de euros y con otro acuerdo pendiente con Fincantieri por 415 millones más.

Indra, con los ojos también en Escribano

Por su parte, Indra no se queda quieta. A la vez que entra en la puja por IDV, ha contratado a PwC para estudiar una posible integración con Escribano Mechanical & Engineering (EM&E), su segundo accionista con un 14,3% del capital. Solo la Sepi, el brazo inversor del Estado, tiene más.

Y no es un movimiento aislado. Indra tiene un plan ambicioso: cerrar 2025 con 5.200 millones en ingresos y duplicarlos hasta los 10.000 millones en 2030. IDV podría ser la pieza clave para acelerar ese camino.

© Reproducción reservada