Indra Indra está dando importantes pasos hacia la creación de un campeón nacional en Defensa, tal y como quiere el Gobierno, su principal accionista. Por ello, durante las últimas semanas, dicha empresa se ha estado reuniendo con la delegación de la americana General Dynamics (GD), propietaria en España de la fabricante de armas y vehículos Santa Bárbara.
Durante sus encuentros, los representantes de GD han mostrado su predisposición a alcanzar un acuerdo en relación a Tess Defense, el consorcio al que, desde 2020, se le ha encomendado la fabricación de los 8×8 Dragón. Estos vehículos blindados de combate serán la columna vertebral del Ejército de Tierra español. El Gobierno ha autorizado una inversión de 2.500 millones de euros a lo largo de esta década para financiar dicho programa.
8×8 Dragón
Actualmente, la mayor accionista de Tess Defense es la filial en manos de los estadounidenses, con los que el equipo del consejero delegado de Indra, José Vicente de los Mozos, lleva desde finales del pasado curso sondeando un acuerdo. En concreto, una transacción que le permita a la participada por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales asumir el control mayoritario del consorcio.
Los demás accionistas de Tess Defense y de Indra, a saber, la vasca Sapa Plasencia y la madrileña Escribano Mechanical & Engineering, están dispuestos a aceptar dicho acuerdo. El foco de las conversaciones, por tanto, gira actualmente en torno a los propietarios estadounidenses de Santa Bárbara, la accionista mayoritaria de Tess Defense.
Las conversaciones con GD han atravesado momentos complicados que llevaron a Indra a plantearse la opción de comprarle directamente a dicha empresa toda su filial en España y sus acciones en Tess Defense. Sin embargo, Marc Murtra, presidente de la compañía, ha decidido no pronunciarse sobre esta medida extrema en la junta de accionistas, aduciendo que no podía entrar en detalles.
Otras fuentes se han centrado en la posición del Ministerio de Defensa, que no está del todo conforme con el nivel de autonomía de la filial española de General Dynamics respectos a sus matrices europea y americana. Esto no le ha sentado bien a la mencionada compañía.
«Juan Escriña, en su calidad de Director General de GDELS Santa Bárbara Sistemas, ha sido y sigue siendo el principal interfaz e interlocutor ante el Gobierno, las Fuerzas Armadas y la industria española», ha asegurado GD.
En otra línea de cosas, se han producido una serie de pleitos entre el Gobierno de Espaá y las empresas responsables del desarrollo del prototipo de los vehículos 8×8 Dragón por demoras en la etapa previa a la creación del consorcio Tess para la puesta en marcha de su fabricación.
¿Una buena solución?
Varios representantes del más alto nivel de Santa Bárbara en EE. UU. llegaron a Madrid hace una semanas para ponerse de acuerdo y trabajar con Indra y diversos miembros del Ministerio de Defensa, que dirige Margarita Robles.
Margarita Robles
La solución con la que se superarían todas las diferencias entre las partes implicadas en el acuerdo pasaría por un nuevo reparto accionarial en Tess Defense, previa contraprestación para Santa Bárbara. Lo cierto es que GD no tiene intención de ceder más expertise en España.
Indra, por su parte, pretende asumir, al menos, el 51% de Tess Defense y, así, consumar un reparto accionarial que garantice la españolidad del consorcio. Los americanos se han mostrado dispuestos a ceder la mayoría de sus acciones, pero quiere seguir participando del capital de Tess Defense, aunque sea con un paquete minoritario. En consecuencia, los otros accionistas españoles también tendrían que ceder participaciones a Indra.
Recientemente, se han producido avances en las negociaciones, pero no hay una respuesta clara y unívoca con respecto a los plazos. La operación mencionada podría consumarse este mismo año o demorarse durante otro ejercicio más.
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