La cadena estadounidense de grandes almacenes Kohl’s sorprendió con unos resultados más sólidos de lo previsto en su segundo trimestre fiscal, cerrado el 2 de agosto. La compañía obtuvo un beneficio neto de 153 millones de dólares (131,9 millones de euros), lo que supone más que duplicar (131,8%) las ganancias registradas un año antes.
Los ingresos, sin embargo, mostraron una ligera contracción del 5%, hasta 3.546 millones de dólares. De esa cifra, 3.347 millones procedieron directamente de las ventas minoristas y el resto de otros conceptos. En paralelo, los gastos de operación. Venta y administración se redujeron también un 5%, hasta 3.210 millones.
En el trimestre, Kohl’s contabilizó 175 millones en depreciaciones y amortizaciones, prácticamente sin cambios. Aunque se vio impulsada por un ingreso atípico de 129 millones que reforzó sus cuentas.
En el acumulado del primer semestre fiscal, la compañía multiplicó por más de tres sus beneficios (259,4%), alcanzando los 139 millones de dólares, mientras que la facturación descendió un 4,7%, hasta 6.779 millones.
Estrategia y visión para 2025
El consejero delegado interino, Michael Bender, destacó que los resultados evidencian el avance de las iniciativas estratégicas desplegadas este año. “Hemos conseguido ampliar nuestros márgenes brutos, reducir inventario y disminuir gastos. Lo que ha derivado en unos sólidos beneficios en el segundo trimestre”, apuntó.
De cara al ejercicio 2025, Kohl’s revisó al alza sus previsiones: prevé que las ventas netas caigan entre un 5% y un 6% respecto a 2024. Que las comparables retrocedan entre un 4% y un 5%.
La compañía confirmó además el pago de un dividendo trimestral de 0,125 dólares por acción, que se abonará el próximo 24 de septiembre a los accionistas registrados al cierre del 10 de septiembre.
Kohl’s encara el nuevo ejercicio con el desafío de sostener su rentabilidad en un contexto de moderación del consumo, apoyándose en el control de costes y en la optimización de su estructura comercial.
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