Kutxabank decidió reforzar su estrategia con la creación de Indar, un nuevo grupo de inversión que contará con un capital inicial de 500 millones de euros para impulsar empresas consolidadas o en crecimiento.
Aunque la entidad mantiene su postura de operar en solitario y descarta salir a Bolsa, adopta una estrategia similar a la de Criteria, el grupo inversor de CaixaBank.
En este caso, será Indar la sociedad cotizada, permitiendo al banco vasco ampliar su cartera de participaciones sin comprometer su independencia.
El nuevo grupo buscará inversiones en sectores diversos, con un enfoque inicial en el tejido empresarial vasco.
Sus operaciones estarán basadas en criterios financieros y estratégicos sólidos, con la posibilidad de asociarse con inversores externos o con las fundaciones BBK, Kutxa y Vital, principales accionistas de Kutxabank.
Indar se gestiona de manera independiente del banco y José Iturriaga figura como su primer ejecutivo.
Con una trayectoria destacada en Goldman Sachs, Tubos Reunidos y Talde, Iturriaga aporta experiencia en fusiones y adquisiciones, así como en la gestión de fondos de inversión.
Kutxabank con acciones de Iberdrola
En paralelo al lanzamiento de Indar, la junta de accionistas de Kutxabank aprobó la transferencia de acciones de Iberdrola valoradas en 400 millones de euros a sus tres fundaciones propietarias.
Esta operación, autorizada por el Banco Central Europeo, permitirá reducir la exposición directa del banco en la eléctrica y liberar capital para nuevas inversiones.
Actualmente, Kutxabank posee un 1,59% de Iberdrola, con una valoración de 1.426 millones de euros.
Tras el traspaso, su participación bajará al 1,25%, lo que aún representa un activo clave en su cartera.
Además, la junta aprobó la distribución de un dividendo a cuenta de 83,8 millones de euros, elevando la retribución total a 321,5 millones con cargo a los resultados de 2024.
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