Kutxabank presentará su plan estratégico para el periodo 2025-2027 la próxima semana, junto con los resultados del ejercicio 2024.
La entidad destaca su apuesta por la transformación tecnológica y la innovación, especialmente en el ámbito de la inteligencia artificial.
En este contexto, el banco anunció que continuará con una inversión anual de 200 millones de euros para reforzar su infraestructura digital, al mismo tiempo que potenciará su división de banca privada.
Uno de los movimientos clave dentro de la estrategia de Kutxabank es la creación de un nuevo grupo de inversión, Indar, dotado con un capital inicial de 500 millones de euros.
Este grupo tiene como objetivo competir con los fondos de inversión en la adquisición de participaciones empresariales, especialmente en empresas que juegan un papel tractor en la economía.
Indar buscará principalmente invertir en proyectos localizados en Euskadi, así como en otros con planes de expansión, participando en operaciones de hasta 100 millones de euros.
La apuesta de Kutxabank
El presidente de Kutxabank, Antón Arriola, destacó que Indar operará de manera independiente y se centrará en inversiones a largo plazo, en contraposición a los fondos de inversión que suelen tener un enfoque más a corto plazo y menos comprometido con las comunidades y los grupos locales.
Además, Indar está abierto a la entrada de socios en su capital y no descarta una futura salida a Bolsa para obtener recursos que fortalezcan su capacidad de inversión.
Por otro lado, Kutxabank llevó a cabo recientemente una reestructuración en su cartera de participaciones.
El banco transfirió 400 millones de euros en acciones de Iberdrola a sus fundaciones, BBK, Vital y Kutxa, como parte de una estrategia de diversificación y en cumplimiento con las normativas europeas de control de riesgos bancarios.
A pesar de este movimiento, Kutxabank sigue siendo un accionista importante de Iberdrola, con títulos valorados en 1.000 millones de euros.
Asimismo, la entidad confirmó que continuará reforzando su plantilla, con un plan para incorporar un centenar de nuevos empleados cada año, con especial énfasis en recuperar talento vasco.
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