GettyImagenLa crisis de la agencia de viajes monegasca Star Croisières ha dejado a miles de viajeros sin sus vacaciones planificadas y con importantes sumas de dinero en riesgo, entre ellos decenas de españoles.
El Tribunal de Primera Instancia de Mónaco declaró oficialmente su quiebra el 5 de agosto, con un pasivo de 8 millones de euros frente a activos valorados en apenas 4,3 millones, según informó el diario Monaco Matin.
El colapso afecta a clientes de varios países que habían pagado sus cruceros a través de la agencia, pero cuyos fondos nunca llegaron a las navieras contratadas —entre ellas MSC, Royal Caribbean y Costa Cruceros—.
Esto ha provocado que numerosas reservas, aunque figuraban como confirmadas por Star Croisières, no existieran en los sistemas de las compañías marítimas.
El problema se hizo evidente cuando, a pocos días de embarcar, algunos pasajeros fueron rechazados en el puerto y obligados a costear nuevos billetes o cancelar sus planes.
Según testimonios en redes sociales, la agencia —también conocida como Cruceros Plus— dejó de abonar cualquier salida prevista después del 4 de agosto.
Los afectados han comenzado a coordinarse en grupos de Facebook y WhatsApp para reclamar judicialmente y presentarse como acreedores en el proceso de liquidación.
Detrás de Star Croisières
La empresa, fundada en 2013, había alcanzado 23 millones de euros de ingresos en 2022-2023, superando sus cifras previas a la pandemia, pero no logró sostener su modelo financiero.
Su estrategia de ofrecer cruceros a precio de coste o con pérdidas, junto a un alto gasto en alquileres, agravó el endeudamiento.
Algunos clientes llegaron a pagar más de 30.000 euros por viajes programados incluso para 2026 y 2027.
El último comunicado de la compañía reconocía que la sociedad SARL Star Croisières/Cruceros Plus no podía “cumplir sus compromisos” y que las navieras tendrían que decidir si mantenían las reservas.
Mientras, MSC Cruceros ha activado un plan para contactar a los pasajeros y ofrecer soluciones: si el pago fue íntegro, se respetará el viaje con la presentación del comprobante; en caso contrario, se permitirá abonar el saldo directamente para confirmarlo.
La naviera también facilitará documentación para que los afectados actúen ante el liquidador judicial.
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