El Ministerio de Trabajo ha hecho pública su «última oferta» en la mesa de diálogo social, en la que se discute la reducción de la jornada laboral máxima a 37,5 horas a partir de 2024. La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y su equipo han optado por este enfoque al reconocer que no hay tiempo suficiente para implementar una jornada de 38,5 horas este año. En este contexto, el Ministerio ha incrementado el paquete de ayudas y subvenciones para las pequeñas empresas en sectores como el comercio y la agricultura.
Joaquín Pérez Rey, número dos de Díaz, ha instado a la patronal CEOE y Cepyme a definir su postura antes de la próxima reunión, programada para cerrar la reforma el 11 de noviembre. Sin un acuerdo en el horizonte, Trabajo ha advertido que firmará unilateralmente con los sindicatos en condiciones menos ventajosas para las empresas.
El Gobierno mantiene un enfoque tripartito
El Gobierno mantiene un enfoque tripartito para esta reducción, que se basa en tres pilares: la implementación de un nuevo registro horario digital accesible para la Inspección de Trabajo, una reforma del derecho a la desconexión digital de los empleados en línea con la normativa europea y un plan de ayudas para pequeñas empresas que facilite la transición a la nueva jornada laboral que propone Díaz.
El llamado ‘plan pyme 375’ incluye diversas estrategias para apoyar y bonificar a las empresas en sus cotizaciones sociales por la contratación de trabajadores fijos y la conversión de contratos parciales a tiempo completo en empresas de menos de diez empleados. Además, se añadirán bonificaciones para microempresas con menos de cinco empleados en sectores que están más alejados del objetivo de horas semanales, como el comercio, la hostelería, la peluquería, la limpieza y la agricultura. El Gobierno estima que alrededor de 470,000 empresas se beneficiarán de ayudas directas que oscilarán entre 350 y 375 millones de euros, con un límite de 6,000 euros por empresa, con el fin de mejorar su productividad y digitalización.
Los sindicatos denuncian un bloqueo
Los sindicatos han denunciado un «bloqueo» por parte de la patronal tras diez meses de negociaciones. Aunque los empresarios no suelen comentar sobre estas cuestiones, se han mantenido firmes en su enfoque, priorizando los convenios colectivos para la reducción de la jornada laboral.
Carlos Bravo, secretario de políticas públicas y protección social de CCOO, ha expresado su frustración, afirmando que «esto no da más de sí». Los sindicatos están dispuestos a evaluar la última propuesta, pero solo si perciben posibilidades de consenso con la patronal. A su vez, han señalado que las medidas para mejorar el control horario y la desconexión digital requieren ajustes antes de finalizar la reforma en el menor plazo posible. Bravo sostiene que «lo mejor que puede ocurrir es un acuerdo tripartito».
© Reproducción reservada