El Ministerio de Hacienda está tomando cartas en el asunto para cumplir con la exigencia de Bruselas de incrementar los ingresos tributarios en un 0,2% del PIB. Esto se logrará mediante una revisión de los beneficios fiscales. De hecho, sobre la mesa de María Jesús Montero. Ministra de Hacienda, hay tres propuestas que podrían sumar hasta 4.200 millones de euros más a la recaudación anual. Las propuestas incluyen la eliminación de la declaración de la renta conjunta para matrimonios. La reducción del límite exento del IRPF por aportaciones a sistemas de previsión social (como los planes de pensiones), y la exención de las SICAV.
Hacienda revisará los incentivos para aumentar los ingresos
En el plan fiscal estructural enviado a la Comisión Europea en octubre, el Gobierno ya mencionaba que revisaría ciertos incentivos fiscales con el objetivo de aumentar los ingresos, apoyar la transición energética y promover la equidad. Además, el plan fue aprobado por la Comisión Europea a principios de noviembre.
Por su parte, la AIReF también apoya esta revisión, pues en un análisis publicado en 2020 destacó varias distorsiones causadas por los beneficios fiscales actuales, las cuales pueden tener efectos regresivos en la economía. Entre las principales medidas propuestas se encuentran los límites a las reducciones en la base imponible por las aportaciones a los planes de pensiones, que el informe considera poco efectivas para muchos ahorradores.
Plan de pensiones: ¿se acabó el chollo fiscal?
Uno de los cambios más significativos ya se implementó en 2023, cuando el Gobierno redujo el límite de aportaciones deducibles a planes de pensiones individuales de 8.000 a 1.500 euros. A cambio, se incentivaron los planes de pensiones ofrecidos por las empresas, con un límite de 8.500 euros. Además, ahora los trabajadores pueden aportar más que la empresa si ganan menos de 60.000 euros, lo que era imposible antes.
A partir del 1 de enero de 2025, los ahorradores podrán retirar anticipadamente el dinero de sus planes de pensiones, pero con un coste fiscal más alto. Por ejemplo, un trabajador de 40 años con un salario anual de 30.000 euros y que retire 20.000 euros de su plan verá un aumento en su IRPF de un 19,34% a un 25,87%, lo que le supondrá pagar casi 7.000 euros más en impuestos.
¿Qué pasa con los matrimonios y las SICAV?
Hacienda también está considerando modificar otros beneficios fiscales. Uno de ellos es la posibilidad de limitar la declaración conjunta de los matrimonios. Esta fórmula, que ofrece una reducción de unos 3.400 euros anuales a las parejas que tributan juntas, ha sido criticada por generar desincentivos laborales para el segundo miembro de la pareja. Sin embargo, como esta medida se utiliza mayormente en parejas con rentas bajas, no parece que el Gobierno la vaya a modificar por el momento.
Por otro lado, se está evaluando la eliminación del tipo reducido del 1% en el impuesto de sociedades para las SICAV, que, aunque tenía la intención de fomentar la inversión colectiva, en la práctica beneficia a un pequeño número de inversores. Esta medida fue propuesta por Sumar durante las negociaciones presupuestarias, pero finalmente no fue incluida en la reforma fiscal aprobada por el Gobierno.
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