El presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, mostró su rechazo al proyecto de reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales impulsado por la vicepresidenta Yolanda Díaz, argumentando que no puede aplicarse de manera uniforme ni por imposición normativa.
Durante su intervención en el foro CREO 2025 de Cinco Días, Bonet alertó que la regulación laboral se convirtió en uno de los principales obstáculos para las empresas.
“Ya hay empresas que están en las 37,5 horas, pero al mismo tiempo hay otras en las que no se puede bajar”, afirmó.
Bonet también cuestionó la efectividad de imponer cambios laborales por decreto, destacando la diversidad de realidades empresariales en el país.
A pesar del tono conciliador adoptado por Díaz en ese mismo evento, donde aseguró que hay espacio para abordar el absentismo laboral dentro de la reducción de jornada, el presidente de la Cámara dejó claro que el debate no puede simplificarse ni ignorar las necesidades del tejido productivo.
Más allá de la jornada laboral
Otro de los puntos destacados por Bonet fue la desconexión entre la formación disponible y las necesidades reales del mercado laboral.
“No se forma gente para lo que las empresas demandan”, advirtió, subrayando la urgencia de alinear la educación y la formación profesional con los perfiles más demandados.
Asimismo, dirigió duras críticas al Gobierno por el aumento de la presión fiscal sobre las compañías.
“Cuando las administraciones tienen un problema, lo primero que hacen es cargar contra las empresas con impuestos y cotizaciones sociales”, declaró.
A su juicio, esta carga limita la productividad, la inversión y la innovación, alejando a España de economías punteras como la estadounidense o la alemana.
En positivo, Bonet destacó los avances logrados en digitalización gracias al kit digital impulsado por las Cámaras, que ya ha permitido a 700.000 pymes iniciar su transformación tecnológica.
Para Bonet, este tipo de iniciativas, junto con la internacionalización y el emprendimiento, son claves para que España avance hacia una mayor prosperidad en la próxima década.
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