Con el objetivo de relevar al modelo Virage, que se lanzó al mercado en 1991, Aston Martin comercializó en 2001 el V12 Vanquish, un cupé deportivo diseñado por Ian Callum que se mantuvo en producción como buque insignia de la firma británica hasta 2007.
Cinco años después de su despedida, compartiendo una nueva plataforma con el DB9, llegó una segunda generación del Vanquish, obra del diseñador Marek Reichman, que se fabricó hasta 2018, cuando Aston Martin lo sustituyó por el DBS.
Por último, los conductores han tenido que esperar 6 años para poder comprar el nuevo Vanquish, el tercero de la saga, que no solo es el buque insignia de la casa Gaydon, sino que ha mejorado su potencia y prestaciones, convirtiéndose, por ello, en el Aston Martin de producción en serie más veloz y tecnológico de todos los tiempos.
El nuevo Vanquish, que conserva las características clásicas de sus antecesores (la carrocería cupé de estilo GT y su mecánica de gasolina con 12 cilindros en V situada en posición frontal), posee un rendimiento sin precedentes. Esto se debe a que estrena un nuevo 5.2 V12 Twin-Turbo con 835 CV de potencia y 1.000 Nm de par máximo. Además, ofrece una velocidad punta de 345 km/h, la mayor alcanzada hasta la fecha por un Aston Martin de calle y producido en serie.
Esta no se trata de otra edición especial limitada, sino que la marca automovilística planea fabricar casi 1.000 unidades del nuevo Vanquish al año. Las entregas de este a los clientes arrancarán en el último trimestre de 2024.
Entre sus aspectos más importantes destacan los siguientes:
- Un nuevo 12 cilindros bajo su capó que ofrece la mayor potencia específica jamás alcanzada por un motor V12 de Aston Martin: 160 CV por litro de cilindrada.
- Un bloque de cilindros y bielas reforzadas.
- Culatas rediseñadas que incorporan árboles de levas reperfilados.
- Nuevas entradas de admisión y escape.
- Bujías de encendido reposicionadas.
- Nuevos inyectores de combustible con un caudal que es un 10% mayor.
- Nuevos turbocompensadores que trabajan a mayor presión, reducen su inercia, y aumentan las prestaciones y la respuesta del acelerador. Se trata de turbocompensadores de inercia reducida, capaces de trabajar a una velocidad máxima hasta un 15% más alta que los anteriores, aprovechando la mayor energía de los gases de escape y proporcionando un mayor flujo de aire al motor.
Asimismo, para que la actual versión del V12 Twin-Turbo sea la más impetuosa de la historia, el nuevo Vanquish incorpora la función Boost Reserve, tecnología que permite una entrega de potencia aún más inmediata que antes. Esto es especialmente útil para realizar maniobras de adelantamiento o cunado se practica una conducción deportiva, incluso dentro de un circuito de carreras.
La mentada reserva de sobrealimentación aumenta la presión del turbo por encima de lo que se necesita para acelerar, haciendo que funcione también cuando se requiera toda su potencia disponible. Este proceso se lleva a cabo cuando se demanda una aceleración parcial, de forma imperceptible para el conductor, equilibrando la posición de la mariposa del acelerador y la de la válvula de descarga inteligente del turbo. Ambas coinciden para que, cuando el conductor necesite la máxima potencia y par, el acelerador libere el exceso de presión de sobrealimentación y, así, pueda ofrecer una respuesta instantánea.
Con la ayuda de Valvoline, socio técnico del equipo de Aston Martin Aramco de Fórmula 1, el V12 Vanquish estrena un avanzo aceite lubricante de motor que le proporciona un mejor rendimiento. Al fluir por dentro de un enfriador de aceite de motor sobredimensionado, que, ahora, aumenta en un 50% su capacidad de refrigeración, el aceite sintético que circula por el motor siempre se mantiene a una temperatura óptima de funcionamiento. Esto ayuda a preservar una óptima presión del aceite del motor.
En otro orden de cosas, por primera vez en un Aston Martin equipado con un V12 delantero, la caja de cambios automática ZF de 8 velocidades, que ha acortado el tiempo de paso entre marchas, se combina con un diferencial trasero electrónico de estabilidad ESP. Esto mejora el comportamiento dinámico del coche y permite gestionar el deslizamiento de las ruedas del eje posterior para optimizar la tracción en todas las condiciones de adherencia posibles.
El e-diff del nuevo Vanquish puede pasar de estar totalmente abierto a bloquearse en solo 135 milésimas de segundo. Esto mejora significativamente su dinámica, proporcionándole mayor agilidad en curvas de radio pequeño o medio, a la vez que le proporciona al conductor una mayor capacidad de control si se produce un sobreviraje o en los cambios de carril a alta velocidad.
El chasis del nuevo Vanquish también ha evolucionado. Al igual que los recientes DB12 y Vantage, el mentado automóvil posee una carrocería de aluminio con suspensión delantera de doblo horquilla y trasera multibrazo. Además, los componentes adicionales de refuerzo localizados en sus bajos aumentan un 75% su rigidez lateral, en comparación con el DBS 770 Ultimate, anterior buque insignia de la firma.
Gracias al aumento de la distancia entre eje de 80 mm, todos ellos alargados entre el eje delantero y la zona del pilar delantero, el chasis del Vanquish posee un refuerzo transversal del motor más rígido que le proporciona una mayor resistencia torsional y lateral entre las torretas de la suspensión delantera. Esto le da más rigidez en el montante de los amortiguadores Bilstein DTX, estrenados originalmente por el DB12.
Las barras estabilizadoras del nuevo Aston Martin son de mayor diámetro, lo que contribuye a su mejora general. Además, en caso de que el conductor quiera llevar el carácter deportivo de este coche a un nuevo nivel, podrá activar los modos Sports y Sport+ del sistema de suspensión para disfrutar de un comportamiento más firme por parte de este.
Por otra parte, el sistema de dirección asistida eléctrica, EPAS, del Vanquish se ha recalibrado para lograr un tacto de conducción más refinado y que transmita confianza. Con una asistencia variable en función de la velocidad de circulación y solo 2,27 vueltas de volante entre topes, las maniobras resultarán más fáciles. Sin embargo, el ajuste de la dirección depende del programa de conducción elegido: si se opta por el modo GT, el comportamiento del vehículo es más equilibrado, apropiado, por tanto, para una conducción normal; si se prefiere un tacto más firme y dinámico, se ha de usar uno de los 2 modos más deportivos.
Algo parecido sucede con el control de estabilidad que posee el sistema e-diff integrado. Este le permite al conductor optar, pulsando el botón ESP de la consola central, entre 4 modos predefinidos del control de estabilidad: On, Track, Off y Wet. Este último se emplea en superficies de baja adherencia.
Asimismo, el Vanquish cuenta con un sistema de frenos carbonocerámicos de serie que está compuesto por discos delanteros de 410 mm y discos traseros de 360 mm, así como preparado para soportar temperaturas de hasta 800 grados, al tiempo que procura una reducción muy significativa del peso no suspendido: 27 kg menos que unos frenos de hierro fundido, lo cual beneficia su calidad de conducción y comportamiento dinámico.
La refrigeración idónea de los frenos se garantiza mediante unos conductos que canalizan el aire desde la toma situada en el paragolpes delantero. Además, el sistema ABS del nuevo Aston Martin también es innovador, pues tiene 4 nuevos sensores con los que gestiona el control de deslizamiento de frenos integrado (IBC), el control de tracción integrado (TIC), el control de la dinámica del vehículo integrado (IVC) y la estimación integrada de la dinámica del vehículo (IVE) con el fin de lograr distancias de frenado mucho más cortas que las que permiten los sistemas tradicionales.
A decir verdad, el Vanquish es el primer modelo de la nueva generación de deportivos de la marca que se beneficia del sistema predictivo Corner Braking 2.0. Este le permite al coche mantener la máxima estabilidad mientras se frena en curva y seguir una trayectoria más cerrada, utilizando todo el potencial de frenado de su tren trasero sin perjudicar la estabilidad.
Al usar un sistema de mayor potencia de frenado en el eje trasero, cabe destacar que el conductor puede frenar más tarde, según explican los responsables técnicos de Aston Martin.
Con el objetivo de maximizar su adherencia al asfalto, el Vanquish cuenta con neumáticos de verano Pirelli P Zero de serie, desarrollados a medida y montados sobre llantas de aleación forjadas de 21 pulgadas. Estas son más ligeras que las anteriores. Para climas fríos, Aston Martin ofrece los neumáticos P Zero Winter 2, los cuales poseen un mejor rendimiento de frenado sobre nieve y una calificación de clase A por parte de la UE para asfaltos mojados.
Tanto unos como otros están equipados con el sistema Pirelli Noise Cancellung System (PNVCS), una tecnología capaz de reducir a la mitad el ruido en el habitáculo del coche gracias a un dispositivo de absorción del sonido situado en el interior del neumático.
Con respecto a su diseño, hay que destacar que el nuevo Vanquish tiene un capó más largo, el cual integra rejillas inspiradas en las del monoplaza de Fórmula 1, y con las que se refrigera mejor su motor V12. Además, la parrilla abombada del morro se ha ampliado, ofreciendo, por ello, un 13% más de superficie que el DBS 770 Ultimate. Gracias a ello, se facilita la refrigeración del motor, mientras que las nuevas rejillas de ventilación exteriores del paragolpes canalizan el aire alrededor del frontal hacia los pasos de rueda delanteros. Esto contribuye a la reducción de la temperatura de los frenos.
Otra característica de la zona delantera del mentado vehículo son los faros Matrix LED que estrenan la nueva firma luminosa de la marca y poseen luces diurnas integradas.
Siguiendo la carrocería del Vanquish llegamos a su techo panorámico de cristal. Este se halla tintado para permitir que pase únicamente un 6% de luz solar y tiene un revestimiento especial para proteger a los ocupantes de los rayos ultravioleta. Por ello, no es necesaria una cortina interior adicional, lo que permite ganar espacio.
Otro rasgo distintivo del nuevo Aston Martin son sus tiradores enrasados de las puertas, que, ahora, se despliegan electrónicamente hacia la mano con una simple pulsación, o cuando el automóvil se abre con la llave remota.
Asimismo, sus retrovisores exteriores son más pequeños y ayudan a mejorar la penetración aerodinámica sin perjudicar a la seguridad, pues permiten controlar más espacio que antes hacia atrás.
Por último, destaca su alerón, integrado sobre la tapa del maletero, o las nuevas ópticas LED, un sistema de iluminación inspirado en el del Valkyrie y compuesto por 7 lamas individuales. La parte posterior del Vanquish se completa con un generoso difusor que ocupa todo el ancho del coche y gestiona el flujo de aire de baja presión que fluye por el inferior de este, mejorando así su estabilidad a alta velocidad. Ahí también se encuentra el sistema de escape de acero inoxidable del Vanquish. Este es de nuevo desarrollo y 4 salidas, pero para aquellos que deseen disfrutar de una experiencia auditiva más extrema, el mentado automóvil también está disponible, en opción, con un aligerado sistema de escape deportivo de titanio que emplea un silenciador más pequeño con el fin de ofrecer un sonido V12 más claro y poderoso, al tiempo que se ahorran 10,5 kg de peso.
En su interior biplaza, cuenta con una pantalla digital de 10,25 pulgadas que ofrece configuraciones de visualización personalizadas. Del mismo modo, su pantalla táctil de infoentretenimiento Pure Black de 10,25 pulgadas se ha reubicado en la consola central para que sea más accesible e incorpora una tecnología de control gestual capacitativo con 1 o varios dedos. Esto le permite al usuario controlar la climatización y los ajustes generales del vehículo, en combinación con diales giratorios de metal macizo y ruedecillas.
Los mandos y botones físicos se mantienen para funciones clave como la selección de marchas, los modos del control de tracción y el ajuste del climatizador. Asimismo, también hay mandos con los que elegir entre ajustes diversos para el chasis, la respuesta del control de estabilidad, el escape, el asistente de carril y el control de distancia de forma intuitiva y sin necesidad de apartar la mirada de la carretera. Por último, el botón de arranque o parada del motor, de cristal iluminado, se halla en el centro de la consola central.
El nuevo Vanquish es el cuarto modelo que incorpora la última generación del sistema de infoentretenimiento de Aston Martin, desarrollado por la propia marca y que ya incorporan coches como el DB12, el Vantage y el DBX707. Dicho sistema se complementa con una nueva aplicación de Aston Martin, compatible con dispositivos Apple iOS y Android, lo cual permite la interacción y el control sobre algunos parámetros del vehículo desde el smartphone del cliente.
Por lo que respecta al puesto de conducción, el Vanquish posee asientos deportivos Plus de serie, mientras que, como opción, se ofrecen los asientos Performance de fibra de carbono. Por detrás, el espacio se ha configurado de forma que en él se puedan acoplar perfectamente los exclusivos juegos de maletas de piel, disponibles como accesorio.
Como en todos los modelos de Aston Martin, los usuarios del Vanquish podrán configurarlo con múltiples opciones de personalización a través del servicio específico Q by Aston Martin. Sin embargo, no es necesario solicitar un equipo de sonido con sobreprecio porque, de serie, el coche ya viene equipado con el mejor sistema de audio Bowers & Wilkins, perfectamente integrado y con un sonido adapatado al Vanquish gracias a los 15 altavoces y la doble amplificación que posee.
© Reproducción reservada