Los entusiastas de la relojería conocen bien el Carrera de TAG Heuer, un ícono que rinde homenaje a la velocidad. Lanzado en 1963 (el año pasado celebró su 60 aniversario), fue concebido por Jack Heuer con los pilotos de automovilismo en mente. Su nombre proviene de la famosa y desafiante Carrera Panamericana, que se llevó a cabo en México entre 1950 y 1954. Este reloj, equipado con tres contadores, ofrece información crucial y fácilmente legible durante las competiciones de velocidad.
Las actualizaciones de TAG Heuer
A lo largo de los años, TAG Heuer ha actualizado el modelo para adaptarlo a las nuevas tendencias, siempre manteniendo su conexión con el mundo del automovilismo. En 2016, la marca lanzó la gama más audaz y enfocada en el rendimiento: el Carrera Extreme Sport. Hoy, esta serie regresa renovada con dos versiones distintas: el Carrera Chronograph Extreme Sport y el Carrera Chronograph Tourbillon Extreme Sport.
La nueva colección incluye seis cronógrafos, de los cuales dos cuentan con un tourbillon. Aunque sus dimensiones son más suaves que en modelos anteriores, siguen siendo impresionantes: 44 mm de diámetro y 15,1 mm de grosor. Todos comparten una correa de caucho integrada, inspirada en los sistemas de admisión de aire de los autos de carrera, además de una resistencia al agua de 100 metros y una esfera esqueletada que revela la complejidad del mecanismo del reloj. Este diseño, aunque podría comprometer la legibilidad, se ha optimizado con líneas negras que aportan un aire deportivo. Los diseñadores han añadido mayor contraste a varios puentes para facilitar la lectura de la información.
El Carrera Chronograph Extreme Sport está impulsado por un movimiento de cronógrafo automático, el calibre TH20-00 (anteriormente conocido como Heuer 02), con una reserva de marcha de 80 horas. Este mismo movimiento se encuentra en los cronógrafos Glassbox actuales de TAG Heuer y en el Carrera Chronograph x Porsche 963, lanzado el pasado junio. Sirve como predecesor de la serie Extreme Sport.
Las cuatro referencias del Carrera Chronograph Extreme Sport
incluyen: una con caja de titanio y esfera naranja (8.050 euros), otra de titanio y cerámica en azul (8.050 euros), una tercera con titanio y revestimiento DLC en negro (8.250 euros), y la última con caja de oro rosa y titanio de grado 2 (12.100 euros). Todas presentan un bisel fijo de cerámica negra mate con escala taquimétrica.
Por su parte, el Carrera Chronograph Tourbillon Extreme Sport está equipado con el calibre TH20-09, que incluye un tourbillon a las 6 en punto y una autonomía de 65 horas. Una de sus versiones está hecha de titanio de grado 2 oscurecido con un bisel de carbono forjado negro (25.700 euros). La otra es de oro rosa, incluyendo el bisel (32.250 euros).
En todas las versiones, a diferencia del Carrera Chronograph x Porsche 963, los contadores del cronógrafo están calados, reafirmando que son más Extreme que nunca.
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