Javier VillagránAntonio Puente sube las escaleras del flagship de Adolfo Domínguez en Serrano con una sonrisa tallada en el rostro. Se mueve con seguridad y comodidad, aunque en su mirada se percibe su lado más reservado, casi oculto. Como un samurái que combina el control de su interior con su habilidad de combate, el CEO de la empresa se muestra orgulloso de estar venciendo a su enemigo: la crisis económica de la firma. Al cierre de la entrevista, la facturación superaba los 83,8 millones de euros y los fantasmas de las pérdidas iban desvaneciéndose dentro de los procesos de innovación y el desembarco a gran escala en Oriente Medio. La sabiduría nipona está refundiendo el modelo de la moda en España…
Le llaman el japo por sus años en el país asiático, ¿considera que lidera más al estilo japonés o al español?
El proyecto profesional con Adolfo Domínguez es el primero que hago dentro de España. Estuve, prácticamente, 20 años de mi carrera fuera del país y tengo claro que mi perfil no es muy español, pero tampoco diría que es japonés. He tenido que trabajar con equipos internacionales, donde hay que buscar lugares comunes y la forma de avanzar proyectos, y eso es lo que intento traer aquí. Sin embargo, es lógico que si uno está tanto tiempo en un país, inevitablemente en el trato personal se te pegan cosas y eso lo percibe la gente.
¿Qué gran diferencia nota en la gestión empresarial de ambos países?
Hay una forma de pensar muy japonesa que es de fuera hacia adentro, un poco como pelar una cebolla para encontrar el problema o la solución. Y la que tenemos aquí es mucho más lineal. Creo que las dos aportan y que son formas distintas de llegar al éxito. Conocer ambas me sirve para, en algunos momentos, tomar distancia del pensamiento tradicional y ver cómo llegar a una solución por otros caminos.
En los primeros nueve meses del ejercicio fiscal 2023/24 facturaron 83,8 millones de euros, ¿qué previsiones manejan para los próximos meses?
Estamos en un buen momento de la compañía. Es un momento muy ilusionante en el que llevamos ya varios años creciendo. Aunque previsiones concretas no podemos dar porque somos empresa cotizada, sí es cierto que tenemos una trayectoria ascendente en la que –si nos vamos comparando trimestre a trimestre contra el año anterior–la perspectiva que tenemos sigue siendo positiva.
El año fiscal anterior significó la salida oficial de la crisis y ahora nuestra trayectoria sigue siendo ascendente.
Clara apuesta por la solidaridad
El Banco de Alimentos de Ourense ha efectuado recientemente una compra de 4.600 kilos de alimentos para ayudar a las cerca de 70 entidades sociales de la provincia. Esta compra se ha realizado con una donación del grupo textil Adolfo Domínguez procedente de la venta de las entradas al desfile de presentación de su colección “Intuición”, celebrado en abril del pasado año en Madrid.
“La presentación de cada una de nuestras colecciones es siempre un motivo de celebración y orgullo, y todavía más cuando toma la forma de un desfile como el celebrado en Matadero el año pasado. Pero todo cobra mucho más sentido cuando al hacerlo puedes ayudar también a aquellos que más lo necesitan”, afirmó Patricia Alonso, directora corporativa de Márketing y Comunicación de la firma.
Y es que con las mil entradas vendidas se ha permitido la compra de potitos, leche, arroz, cacao, galletas y tomate frito que serán donados a las entidades benéficas con las que colabora el Banco de Alimentos de Ourense.