El mundo de la moda está de luto tras conocerse el fallecimiento de Isak Andic, fundador de la icónica marca española Mango, a los 71 años. El trágico suceso ocurrió este sábado, cuando Andic cayó por un barranco de 150 metros de altura en las cuevas de salitre de Collbató, en Barcelona. La noticia fue confirmada por su hijo, quien se encontraba practicando senderismo junto a su padre en la zona.
Toni Ruiz, CEO de Mango, emitió un comunicado pocas horas después del accidente: “Con profundo pesar lamentamos comunicar el inesperado fallecimiento de Isak Andic, nuestro presidente no ejecutivo y fundador de Mango, en un accidente ocurrido este sábado”. Las palabras del ejecutivo han resonado en todo el sector de la moda española, que lamenta la pérdida de una de sus figuras más relevantes.
Desde la firma Mango también han compartido un mensaje de homenaje: “Isak ha sido un ejemplo para todos nosotros. Ha dedicado su vida al proyecto de Mango, dejando una huella imborrable gracias a su visión estratégica, su liderazgo inspirador y su compromiso inquebrantable con los valores que él mismo impregnó en nuestra compañía. Su legado refleja los logros de un proyecto empresarial marcado por el éxito, pero también por su calidad humana, proximidad y cuidado hacia toda la organización”. El comunicado concluye reafirmando el compromiso de la compañía con continuar su legado como el mejor homenaje al fundador.
Un legado imborrable en la moda española
La pérdida de Isak Andic ha generado conmoción tanto en sus allegados como en el sector textil y entre los consumidores de moda española. Andic fue uno de los pioneros en democratizar el comercio textil, posicionando a Mango como una de las marcas más influyentes en la moda global. Gracias a su liderazgo, la firma logró trasladar tendencias de las pasarelas al público general, adaptando diseños de alta costura a precios accesibles.
Las colaboraciones con personalidades internacionales como Victoria Beckham, Simon Miller o Camille Charrière reflejan la visión innovadora de Andic, quien logró fusionar lujo y accesibilidad. Además, la marca se convirtió en un referente del fondo de armario de figuras tan reconocidas como la Reina Letizia, quien ha lucido prendas de Mango en varias de sus apariciones públicas, consolidando a la firma como parte del estilo de la Casa Real española.
Un futuro liderado por sus hijos
El inesperado fallecimiento de Isak Andic deja a Mango sin su alma y fundador, pero también sin su presidente no ejecutivo y máximo accionista. Este controlaba el 95% del grupo textil catalán a través de la sociedad patrimonial Punta Na Holding, de la que poseía la totalidad de las acciones. La mayoría las ostentaba a nivel personal, y un pequeño porcentaje a través de otra de sus empresas, Punta Na, dedicada a la inversión inmobiliaria y de la que también era único accionista.
En los últimos dos años, Andic había introducido cambios en la gobernanza tanto de la textil como de sus patrimoniales, con el objetivo de asegurar una continuidad alineada con su visión. Su deseo era que la firma siguiera siendo de capital familiar, pero con una gestión plenamente profesional. Tras su pérdida, los tres hijos de Andic tomarán el relevo en Mango, junto a Toni Ruiz, consejero delegado y accionista, quien liderará la gestión del grupo.
Consternación y reconocimiento público
El impacto de la trágica noticia ha trascendido los límites del sector textil, generando muestras de pesar desde distintos ámbitos de la sociedad. Mango, una marca que bajo la dirección de Andic creció hasta alcanzar reconocimiento internacional, simboliza el sueño empresarial de un hombre visionario que revolucionó la moda española.
Hoy, su pérdida deja un vacío profundo, pero también el firme compromiso de seguir construyendo sobre el sólido legado que deja en la industria. La moda española despide a uno de sus grandes nombres, mientras el recuerdo de Isak Andic perdura en cada prenda y en cada diseño que hizo accesible a todos.
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