La Reserva Federal mantiene los tipos de interés pese a las presiones de Trump

Jerome Powell y Donald TrumpJerome Powell y Donald Trump

La Reserva Federal de Estados Unidos ha decidido mantener los tipos de interés en el rango actual del 4,25% al 4,5%, desoyendo las fuertes presiones del expresidente Donald Trump, que ha llegado a calificar de “estúpido” e “imbécil” al presidente del banco central, Jerome Powell.

En un momento de gran incertidumbre económica y política, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) ha optado por la prudencia, asegurando que solo contempla dos posibles recortes de 0,25 puntos hasta fin de año, pese a las demandas de Trump de bajadas mucho más agresivas.

El expresidente republicano, en plena campaña electoral, ha redoblado sus ataques personales a Powell, a quien acusa de “costar una fortuna al país”. Incluso bromeó con la idea de nombrarse a sí mismo presidente de la Fed, comparándose —sin intención irónica— con líderes populistas como Hugo Chávez.

Una economía en desaceleración

La Fed ha publicado nuevas proyecciones económicas, donde prevé un crecimiento del 1,4%, una tasa de desempleo del 4,5% y una inflación del 3% para este año, cifras menos optimistas que las estimaciones de marzo. Aun así, Powell ha reiterado que el actual nivel de tipos permite una postura de “esperar y ver”, sin necesidad de precipitaciones.

En palabras del presidente de la Fed: “Las condiciones del mercado laboral siguen siendo sólidas y la inflación, aunque algo elevada, está en descenso. Tomaremos decisiones basadas en los datos”.

El organismo también prevé que los tipos se sitúen en torno al 3,5%-3,75% en 2026, ligeramente por encima de sus previsiones anteriores, con nuevos recortes en 2027 hasta el entorno del 3%-3,25%.

Riesgos externos y tensiones internas

La política arancelaria de Trump y el conflicto entre Israel e Irán añaden tensiones al escenario económico global. El encarecimiento del petróleo y el aumento de la incertidumbre internacional podrían obstaculizar los esfuerzos de la Fed por alcanzar un aterrizaje suave, es decir, controlar la inflación sin provocar una recesión.

Trump, por su parte, se queja abiertamente de los vencimientos de la deuda pública durante su posible segundo mandato y confía en que podrá refinanciarla tras sustituir a Powell. Entre sus posibles candidatos figura su actual secretario del Tesoro, Scott Bessent.

Sin embargo, la Fed advierte: una rebaja apresurada de tipos podría tener el efecto contrario al deseado si los mercados perciben que se compromete la lucha contra la inflación. La credibilidad del banco central, recuerdan los analistas, es clave para mantener la estabilidad a largo plazo.

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